Así ha informado uno de los ex candidatos, Mohamed Lamrani, y lo ha confirmado el presidente, quien ha adelantado que no se presentará al nuevo proceso que se tiene que abrir.
Lambrani había retirado previamente su candidatura, visiblemente enfadado, porque no quiere "ser el sustento de nadie, ni pagar el sueldo de nadie: ni del presidente, ni de los delegados, ni de ningún gandul". El ex candidato aseguró entonces que aportaría lo que le corresponda como socio, que básicamente es lo tiene que ver con el uso del teléfono de la parada. En definitiva, lo que esté justificado por cuenta bancaria, pero no aquello "que se pague en B", dijo.
En este sentido, afirmó que está "claro" que no va a "asumir la responsabilidad de una asociación en declive", sobre todo cuando "no se ha hecho una asamblea de la anterior junta para para saber las cuentas qué es lo que se ha gastado ni lo que se ha realizado".
Cabe recordar que hubo un posible tercer candidato, Fausi Mohamed, quien había anunciado su intención de presentarse igualmente a dichas elecciones, aunque el plazo concluía el martes a medianoche y, poco antes, aún no había entregado la solicitud formal por escrito. Según pudo saber El Faro, esta candidatura nunca tuvo visos de ser algo real y plausible.
Así pues, ahora hay que ver cuándo se convocará la nueva asamblea general para decidir el nombre del futuro presidente de la asociación.
Por el momento, no hay nada claro salvo que no hay candidatos, ya que Lambrani dice que tanto los estatutos como el proceso electoral son "nulos". "Ya veré lo que hago, pero esta asociación está muerta", ha asegurado este lunes Lamrani, quien ha insistido en que los estatutos son nulos, "porque se basan en leyes derogadas", y porque dicen que "la asamblea elegirá al presidente, pero no el modo" y no se ha corregido pese a que ha habido "avisos" por parte de la Administración.
"Si hay un proceso legal, sí me presentaré, pero tal como están los estatutos no puede haber elecciones y hay que empezar por la base, es decir, un proceso electoral basado en la ley de 2002 y un estatuto que diga cómo se elige el presidente", ha concluido.
Cabe señalar que Lamrani presentó, el pasado viernes, un escrito en la Delegación del Gobierno en el que lamenta que los estatutos , "además de ampararse en una ley inexistente (Ley 49/1977, de 1 de abril) y en un Real Decreto derogado (873/197, de 22 de abril), estaban obsoletos y tampoco recogen el procedimiento de elección del presidente, estaban obsoletos y tampoco recogen el reglamento de funcionamiento interno". El escrito dice que, además, "las elecciones celebradas el pasado 26 de mayo del año en curso fueron convocadas en un trozo de papel pegado en una parada de taxis sin la firma ni sello de la entidad".
Por ello, Lamrani solicitaba "que, por todo lo expuesto y como socio de la Asociación de Trabajadores Autónomos del Taxi de Melilla (...), sea anulado cualquier acto o inscripción de la nueva junta directiva de esta asociación hasta que se aclaren las cuestiones expuestas".
La cara es el espejo del alma ,Sr.Lamrani, a buen entendedor.....