Ver series es una de las aficiones de ocio más extendidas en nuestros tiempos y si bien hay melillenses que las ven sin comer nada, hay quienes prefieren picar algo como palomitas o chocolatinas.
Y es que comer mientras se ve una película, serie o cualquier pantalla resulta estimulante para numerosas personas, convirtiéndose en una práctica muy extendida en el mundo ¿Quién no se ha sentado con amigos en el sofá para ver una película mientras se cena pizza?
Victoria, una joven melillense, explica que ella no come nada mientras ve las series, puede que un poco de agua. Hay veces que sí come palomitas cuando se sienta a verlas con sus primos, con los que vive. Ahora mismo está viendo Peaky Blinders.
Hay una segunda joven que también señala que no come viendo series al igual que pasa con Rosa.
Quien sí lo hace es Karim. A él le gusta comer cosas para picar como pipas o chocolate. Carlos, por su lado, como está a dieta come según lo que le toque. “Ahora mismo sigo una dieta entonces, si es la hora de la merienda pues lo que me pone es una fruta y cacahuetes, por ejemplo”.
Su amigo Manu responde riendo “¡qué no como!”. Explica que suele ser algo de picoteo como bebidas, refrescos, etc.
Liat, otra joven, dice que come chocolate mientras ve las series.
En el extranjero no es distinto de España. Una pareja de turistas explica que ellos comen mientras ven series.
Él se llama Tarik y dice que come palomitas; por su lado, su pareja, Élodie, explica riéndose que come un montón y bebe mucha Coca-Cola.
Sin duda, son muchas las personas que comen viendo la televisión, el ordenador o el móvil. En la revista Dinner, explican que una investigadora francesa, la doctora Sophie Mort, analizó este fenómeno y averiguó que las personas que hacen esto en su rutina, reciben un golpe de dopamina que les produce placer y felicidad, algo muy similar al de las sustancias ilícitas.
En el artículo Mort también recuerda que no se puede abusar de la comida. “Sentarse en el sofá a comer y ver series tiene implicaciones de largo alcance y costosas para quienes abusan de ellas. Aunque se libera dopamina, las personas que frecuentan esta rutina pueden sufrir de enfermedades graves como hígado graso, problemas cardíacos, diabetes y algunos tipos de cáncer”.
Por otro lado, la terapeuta nutricional Elisse Museles, de Estados Unidos, explica que sus pacientes quieren ver Friends mientras comen porque así sienten que eliminan el estrés del día, así que lo hagan.
Sin embargo, matiza, deben ser conscientes de que no se puede convertir en un hábito porque “los puede llevar a la obesidad”.
No es la única voz que apunta en esta dirección. En el artículo señalan que las universidades de Harvard (Estados Unidos) y Birmingham (Reino Unido), son muy claras con el tema. En el último informe de American Journal of Clinical Nutrition, los expertos de las dos universidades no recomiendan en ningún caso comer mientras ve televisión porque encontraron que las personas comen más de lo necesario porque están distraídos y el cerebro no es consciente de lo que está entrando a la boca, es decir, no procesa esa información.