‘Pedrito’, uno de los componentes de CantaJuego, asegura que estrenarán en Melilla un espectáculo especial de ‘Cosquillas’ en el que incluirán villancicos. Las entradas para el día 19 saldrán a la venta el próximo lunes a las 18:00 horas.
Es casi imposible que ningún ciudadano de este país no conozca qué es CantaJuego, pero por si hay algún despistado, les contamos que este grupo lleva más de ocho años cantando letras populares y haciendo bailes para que los más pequeños se diviertan con canciones, como ‘Había una vez un barquito chiquitito’ o ‘La hormiguita’. Lo que comenzó como un proyecto educativo para ayudar a docentes y monitores, ha pasado a ser el gran fenómeno infantil de los últimos tiempos. Pedro Ordoñez, ‘Pedrito’, uno de los componentes de CantaJuego, explica a El Faro qué significa participar en este proyecto.
‘Pedrito’ aseguró a El Faro que los niños melillenses y sus familiares van a disfrutar mucho de ‘Cosquillas’, el nuevo espectáculo que han creado. Además, destacó que van a estrenar en la ciudad una versión especial en la que se incluyen villancicos. “Empezamos la Navidad allí”, apuntó.
La Consejería de Cultura amplió esta semana las funciones de CantaJuego, ya que las entradas para el día 20 de diciembre se agotaron en unas horas. El lunes 10 de diciembre a las 18:00 horas saldrán a la venta los tickets para las dos representaciones que habrá el 19 de diciembre.
–¿Qué tiene CantaJuego que encanta a todo el mundo?
–Las cosas que se hacen con cariño y por amor a los niños, que no tienen mayor pretensión que el entretenimiento a través de la música y el movimiento. Creo que ése es el secreto. Esta pregunta nos la hacen muchas veces y no sabes qué más decir. Nunca pensamos que se iban a vender tantos discos. Este proyecto fue creado para ayudar al profesor, al monitor, a las guarderías para que tuvieran una herramienta de trabajo y para que los niños disfruten. Incluso, para que los adultos saquen el niño que llevan dentro. Es un poco complicado saber cuál es el secreto de esto, pero está hecho con mucho cariño y respeto a los más pequeños.
–Resulta curioso que sean las canciones de siempre, las que nos han enseñado nuestros abuelos y padres, las que están triunfando en el público infantil.
–CantaJuego ha recuperado todo el cancionero popular y tradicional, pero aportando unos arreglos y adaptándolo a esta época más moderna. Pero sí, son las de siempre. Aunque hemos llegado a incluir nuestras propias creaciones, que aparecen en los últimos volúmenes. Recuperar las canciones de siempre que tantos recuerdos nos traen y que nos han acompañado toda la vida es parte de este proyecto.
–¿Otro punto que ha ayudado a popularizar CantaJuego es que los niños comparten estas canciones con otros y con sus familias?
–Sí, es un juego en colectivo. Es algo para toda la familia. Cuando el papá ve que el niño está disfrutando, que se lo está pasando bien, que puede hacer esos movimiento y que canta esas canciones, también se anima él, pues se las puede enseñar y eso crea un vínculo familiar muy bonito.
–Pedrito, ¿ha estado siempre en CantaJuego?
–No, llevo sólo tres años con el grupo. Esto lleva ocho años funcionando. Hemos publicado el volumen número ocho, además de otros discos recopilatorios y de directos.
–¿Y qué tal la experiencia?
–Es muy positiva. Sobre todo, cuando terminas un concierto y vas a saludar a los niños y ves todo el amor que te dan. Eso hace que veas tu trabajo como algo especial. Conseguir hacer feliz a un niño para mí es algo indescriptible, es especial. Estoy muy contento y tengo mucha ilusión de seguir. Además, si esto hace que ayudemos a algún niño en el desarrollo de sus habilidades, la vedad, es doble triunfo y alegría.
–¿Todos los componentes de CantaJuego tienen la misma formación o cada uno tiene una especialidad?
–El perfil de la gente de CantaJuego es bastante completo. Cada uno es más fuerte en una disciplina. Está el que tiene más conocimientos pedagógicos, el que proviene de la enseñanza, otros son más bailarines y ayudan con la parte de coreografía, otros con la interpretación o el canto... Entre todos hemos creado un grupo que es basante completo para hacer este tipo de trabajo. Y eso se puede ver, sobre todo, en el directo.
–¿Cómo desarrollan cada proyecto de CantaJuego?
–Todo viene de la parte de dirección, Pedro Zaidman, el ideólogo de todo esto. Él es quien escucha las canciones y ve si pueden encajar en el perfil. Luego se hacen las versiones más modernas, ensayamos y montamos los vídeos. Más tarde planificamos las actuaciones de los directos. Al final, es una aportación de todo el grupo.
–Otra parte que encanta a los niños son las marionetas que utilizan en los espectáculos.
–Teníamos títeres, pero con el tiempo se han ido transformando en muñecos. Son las grandes estrellas del espectáculo. Coco, la Ardilla Buby o Pepe son personajes muy queridos. Van a estar todos en Melilla.
–Las canciones y todas las coreografías, ¿tienen un público específico al que van dirigidas?
–CantaJuego es un proyecto pedagógico musical que está orientado a niños de cero a seis años. El objetivo fue ése, pero luego ha ido encajando con otras edades. A través de la música y el movimiento se potencia el desarrollo del pequeño, así como su imaginación, el oído musical, la expresión corporal, la confianza y la autoestima y las habilidades en grupo. Y si todo esto encaja con toda la familia y no sólo con los niños, pues nosotros, felices.
–¿Notan diferencias entre los niños que son del norte o del sur de España o los niños de otros países?
–No, para nada. Como afortunadamente estamos viajando mucho y estamos visitando tanto el norte como el sur, puedo decirte que no notamos diferencias. Las reacciones son iguales. Incluso, a través de la página de Facebook, sabemos que este proyecto está funcionando en Latinoamérica. No hay diferencia entre los niños. Todos reaccionan muy bien a las canciones y coreografías.
–¿Qué nos puede contar del espectáculo que traen a Melilla?
–’Cosquillas’ es una actuación que tiene nuevos personajes. Los amigos de siempre, como Coco, organizan una fiesta e invitan a todos. La llaman fiesta de las cosquillas y acudirán personajes nuevos, como la Pulga Aventurera. La idea es que todos lleguen a tiempo para celebrarla y CantaJuego estamos ocupados en animar a los compañeros para que acudan a esta celebración. Los niños de Melilla se van a encontrar con muchas sorpresas. Están las canciones de siempre y algunas nuevas del último disco.
–¿Qué podemos aprender con ‘Cosquillas’?
–Los valores de siempre, pues nuestros proyectos se basan en ellos. La idea es que los niños se relacionen, que jueguen. Es una pena que los pequeños de hoy no salgan a la calle o a las plazas a jugar como hacíamos nosotros. La intención es que vuelvan a los juegos de patio. También fomentar el compañerismo, la confianza y la relación en grupo. Que los niños no estén solos, sino que se relacionen y lo pasen bien.
–¿Han pensado en realizar proyectos de CantaJuego para niños con necesidades especiales?
–Hay varios proyectos que se están moviendo en este sentido. Se puede crear algo más específico, pero el proyecto, tal y como está diseñado, funciona también con casos de niños con necesidades especiales. Bailan, cantan las canciones, hacen los movimientos y se aprenden las letras. El enfoque es también para ellos. En cuanto a esos otros proyectos, se irán dando a conocer a través de la web. Siempre intentamos crear y hacer cosas nuevas para llegar a más niños, si es posible. Y si podemos ayudar en algo más, vamos a estar ahí. A parte, visitamos cada vez que nos lo demandan colegios especiales y hospitales.
–También se han animado con el inglés.
–Es cierto que es una asignatura pendente del país. Hemos metido más canciones en inglés esta vez. Y en el espectáculo habrá alguna. Los niños estudian este idioma en le colegio y cantar en inglés es una forma de hacerlo más natural. Lo incorporamos para que lo vean más cercano y que entiendan que no es algo raro. Poco a poco y de cara al futuro estamos incluyendo más canciones en inglés. Además, es abrir una puerta a otra manera de comunicarse.
–Serán muchas las peticiones que les hacen los niños en el directo.
–Tenemos lo que yo llamo los grandes clásicos. No fallas si las eliges y casi antes de que nos las pidan, las cantamos nosotros. Como por ejemplo, ‘El tallarín’, ‘La taza’, ‘La mané’... Y si se nos olvida alguna, ya nos la recuerdan ellos. Nosotros estamos encantados, pues ves la reacción de la gente levantada bailando y cantando, incluido los abuelos y los papás. Es una gran satisfacción.
–Pedrito, ¿y cuál es su canción favorita?
–Eso es difícil de decir, porque hay varias que me gustan, entre ellas, alguna nueva que me encanta, como la de la ‘Pulga Aventurera’, que es muy divertida. También está la de ‘La mané’ y ‘El tallarín’... No puedo decirte una sola.
–Con las numerosas actuaciones que han realizado seguro que tienen un gran número de anécdotas. ¿Nos cuenta alguna?
–Hay muchas, pero os cuento una que me pasó a mí. Una vez que estaba cantando la canción de ‘La de hormiguita’, me hice un corte en la lengua al morderme y sangró un poco. Los niños que siempre están tan atentos comenzaron a decir: “El nene tiene una pupa”. Así que entre los cambios de vestuario, los sanitarios del concierto me fueron curando la herida. Fue muy gracioso que ellos se dieran cuenta de ese pequeño detalle. Nos han sucedido muchas más. Por ejemplo, recuerdo una abuelita que se subió al escenario a cantar y luego, se puso a bailar mientras todos aplaudían. Hay muchas. Tantas como para hacer un libro.