El profesor del Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal de la Facultad de Ciencias de la Educación y del Deporte del Campus de la Universidad de Granada (UGR) de Melilla, Oswaldo Lorenzo Quiles, consiguió el pasado viernes 3 de octubre la cátedra de universidad tras su defensa pública en el Aula Magna de la Facultad de Ciencias de la Educación de Granada.
Lorenzo, que también es coordinador del máster universitario en 'Educación Musical: una Perspectiva Multidisciplinar', estuvo rodeado de compañeros de los Campus de Granada y Melilla, su familia y del vicerrector para los Campus de Ceuta y Melilla, Planificación Estratégica y Comunicación; Salvador del Barrio.

El Faro ha conversado con el catedrático, actualmente el único de todo el Campus de Melilla, quien se mostró satisfecho por haber obtenido tal distinción. No obstante, confió en que pronto le acompañe alguno más de sus 230 compañeros.
Cabe resaltar que Lorenzo sucede a Sebastián Sánchez como único catedrático en el Campus de la ciudad, tras la jubilación de este en el año 2023.
La figura de catedrático supone alcanzar un máximo rango académico, docente e investigador en el sistema universitario español. Pero más allá de ello, es una figura con un prestigio y liderazgo dentro del ámbito universitario.
Sin embargo, Oswaldo Lorenzo recalca que ser catedrático también supone fomentar que la gente pueda avanzar en sus carreras para lograr una mejor sociedad.
"¿Para qué queremos tanta conquista profesional y económica?".
Oswaldo Lorenzo llegó al Campus de Melilla en febrero del año 1995. Un bagaje de 3 décadas que le permite tener una visión de la evolución tanto de la UGR como de la propia ciudad autónoma.
"Hemos avanzado mucho, especialmente en la Facultad, que ha pasado de Escuela Universitaria de Formación de Profesorado de EGB a Facultad de Educación y Humanidades para acabar como Facultad de Ciencias de la Educación y del Deporte, donde contamos con grados como el doble título de Primaria y Ciencias del Deporte, que atrae a muchos estudiantes de toda España".
Catedrático
Tal y como aseguró Oswaldo Lorenzo, para ser catedrático, primero se debe contar con el título de doctor. Después, se ha de acreditar en la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y la Acreditación (Aneca) para profesor titular de universidad, un cargo que debe ejercerse durante no menos de 20 años para poder obtener la cátedra.
También se ha de tener un cierto recorrido con publicaciones científicas de alto nivel en revistas de impacto, así como una serie de méritos de gestión universitaria y de transferencia de conocimientos.
"Cuando uno tiene todo eso, intenta pedir la solicitud de la acreditación de cátedra en la Aneca. Yo inicié ese proceso en enero del 2022".
En su caso particular, Lorenzo cursó el doctorado en la Facultad de Educación de la Universidad Nacional de Educación a Distancia de Madrid, hace 25 años. Además, ha llegado a coordinar un proyecto europeo en la UGR que contó con una financiación de 1 millón de euros y que aglutinó a 20 instituciones de educación superior de países de Latinoamérica, Caribe y Europa.
Una vez se solicita la acreditación, se ha de subir información sobre los méritos del aspirante a una plataforma electrónica. Un proceso "muy tedioso", en palabras de Lorenzo, pues recordó como ello requiere de aportar todo el historial académico, docente y de investigación del solicitante. No en vano, al propio Oswaldo Lorenzo le tomó 6 meses llevarlo a cabo, hasta poder hacer la solicitud electrónica a la Aneca.
No fue hasta marzo del 2024 cuando esta Agencia respondió a Oswaldo Lorenzo, otorgándole la acreditación para el ámbito de ciencias sociales y jurídicas. Fue entonces cuando la UGR le situó en una lista de prelación, donde permaneció cerca de otro año y medio hasta que salió una convocatoria de 30 plazas de cátedra para los primeros 30 puestos de la lista el pasado verano.
A partir de ahí, se constituyó el tribunal, el cual debe cumplir una serie de condiciones, como tener una composición paritaria de 20 catedráticos de diferentes universidades españolas. Además, se requiere que ningún miembro del tribunal haya trabajado con ningún aspirante.
La elección de los miembros titulares y suplentes de la comisión de evaluación de la cátedra se resuelve mediante sorteo público, el cual se hizo el pasado mes de septiembre.
Tras casi 4 años de proceso, Oswaldo Lorenzo defendió su cátedra el pasado viernes en un concurso oposición donde tuvo que presentar a 5 catedráticos de diferentes universidades su currículum académico, historial docente e investigador de transferencia. También presentó un proyecto docente donde sintetizó su conocimiento respecto a la universidad y su Facultad, así como un proyecto de investigación y una evidencia documental que pruebe que todos los méritos presentados sean ciertos.
Aún con todo, el catedrático destacó como este procedimiento se ha simplificado.
"Yo recuerdo en el 2017 cuando me presento a titular, que tuve que ir hasta Granada con el coche cargado de todos los artículos, libros, diplomas y títulos. Ahora mismo, muchas universidades ya aceptan que todos los méritos se presenten de forma digital".
Apuesta para ser ciudad universitaria
Oswaldo Lorenzo aprovechó para hablar del proyecto de la Ciudad Autónoma para convertirse en una ciudad universitaria. Un empeño que, según dijo, dependerá de una serie de factores como la inversión que se realice y la generación del atractivo que generen los títulos, así como del abaratamiento de los costes de desplazamiento.
"Todo es una suma de factores, no es solamente ofrecer títulos interesantes y decir que en un par de años voy a tener un incremento notable. Eso no funciona así. Entiendo que aún faltan algunos años para que podamos alcanzar esa cifra de 5.000 estudiantes".
No obstante, destacó como en Melilla se ha hecho una apuesta integral entre los órganos políticos y el Campus para sumar esfuerzos en todas las direcciones. En este sentido, ensalzó el trabajo del diputado delegado para Asuntos Universitarios, Jesús Romero Imbroda y la directora general de Política Universitaria, María del Mar Alfaya, asegurando que el hecho de que el Gobierno local cuente con cargos dedicados exclusivamente a asuntos relacionados con la universidad supone "todo un avance".
Máster
No se puede pasar por alto el máster en Educación Musical: Una perspectiva multidisciplinar, coordinado por el propio Lorenzo. Un título con una historia de 15 años en el que se aúnan las claves de formación en metodología de investigación educativa a través de contenidos disciplinares de método, diseños o técnicas de investigación en ciencias sociales y educación.
Aunque el propósito transversal es la investigación en educación musical, el objetivo no es formar a músicos.
Oswaldo Lorenzo mostró su orgullo por el hecho de que el máster haya liderado durante los últimos 6 años los puestos entre los mejores títulos de investigación psicopedagógica de toda España. "Todo un hito para Melilla", subrayó.
Este año ha caído a la segunda posición, detrás de un máster de la Universidad de Navarra, pero ello no supone ninguna derrota, pues el título melillense es número 2 de un total de 200 másteres psicopedagógicos de todo el país.
Un máster que también ha contado con profesores invitados de universidades nacionales y extranjeras, lo que da buena muestra de la fortaleza que tiene este título. No en vano, también atrae a un porcentaje nada desdeñable de estudiantes peninsulares, así como a estudiantes de todo el mundo, destacando Lorenzo la fuerte presencia latinoamericana a lo largo de toda su historia.
Por todo ello, Lorenzo anima a la gente a visitar la página web del máster para descubrir el propósito formativo y las propuestas que este ofrece.









Damas y caballeros de El Faro: el primer catedrático del Campus fue Sebastián Sánchez. Un poquito más de rigor, por favor.