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Imbroda espera más expansión en los presupuestos de 2017, pero reconoce que dependerán del déficit nacional y de que el Gobierno central puede tardar hasta el mes de marzo para su aprobación
El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, afirmó ayer que el próximo jueves tendrá en su mesa los gastos fijos que tienen las consejerías y los proyectos que desean poner en marcha las diferentes áreas del Gobierno local. Pero reconoció que esto es como hacer la carta a los Reyes Magos, porque son muchas las peticiones que luego habrá que negociar porque nunca hay tanto dinero para satisfacer a todos.
No obstante, Imbroda subrayó que las cuentas de Melilla para el 2017 no estarán listas hasta que no se aprueben los Presupuestos Generales del Estado (PGE). En este sentido, aseveró que tienen que saber las partidas que van a recibir a nivel nacional y el límite de gasto para cerrar la cantidad total de dinero público que se va a invertir en la ciudad. La previsión del ministro de Hacienda en funciones, Cristobal Montoro, es que no estarán estas cuentas hasta el mes de marzo, añadió.
Más expansivos
El presidente del Ejecutivo local también indicó que espera que los PGE sean “más expansivos” para el próximo año. Aunque reconoció que el déficit influye notablemente en este aspecto y es algo que marcan desde la Unión Europea.
Pero Imbroda insistió en que siempre dan carta blanca y no ponen limitaciones a los consejeros a la hora de solicitar sus presupuestos para el próximo año. Eso sí, tendrán que dialogar en unas semanas y ver qué proyectos son los más interesantes a nivel social para dotarlos de dinero público en 2017.
Para el presidente de la Ciudad, es más relevante que haya un Gobierno central y se puedan aprobar lo antes posible los PGE a que los ministros en funciones visiten nuestra ciudad.
En este sentido, comentó que en el Senado no hay ninguna previsión en la agenda para abordar las cuentas del próximo año. Además, aseveró que a los ministros los puede ver él en Madrid y comentarles los proyectos más destacados de la Ciudad.
En cuanto a la visita que finalmente no se produjo del ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, Imbroda explicó que su intención era que viera la iglesia de La Purísima. No obstante, aseveró que iba a tratar con el ministro otros temas relevantes.
De esta forma respondió a las críticas de diferentes colectivos que denunciaron que Méndez de Vigo no fuera a los colegios o institutos para ver la elevada ratio de alumnos por clase.
Ratios y ACB
El presidente del Gobierno local afirmó que es importante que el futuro ministro de Educación y Cultura vea el patrimonio que se ha descubierto en La Purísima porque debe salir a la luz no sólo para los melillenses, sino también para los turistas.
Además, subrayó que hablará con él sobre el polideportivo que necesita el Campus de la UGR para los títulos de formación en materia educativa, así como de los nuevos solares que podrá a disposición la Ciudad para que el ministerio construya nuevos centros y se reduzca la ratio de escolares por clases.
Pero Imbroda comentó también que la ACB y su reglamento que bloquea a equipos de baloncesto más modestos participar en la liga al más alto nivel será otro ámbito que abordar con el ministro de Educación.
“Confío en una reedición de pactos de La Moncloa”
El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, confía en que la “nueva etapa" que se abre en el Parlamento, con la presumible investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, dé lugar a una reedición de los pactos de La Moncloa en los grandes temas entre PP y PSOE, con la participación también del resto de formaciones políticas.
Imbroda aseguró ayer que es "importantísimo" que se produzcan "grandes acuerdos de presente y de futuro" para gobernar España, ya que eso "sería muy bueno" para el desarrollo económico, social y democrático del país, así como para su imagen exterior.
Según el presidente de la Ciudad, en esos acuerdos sobre los grandes temas "tienen que estar todos", no sólo los grandes partidos, sino también C’s "y también los antisistema", aunque admitió que estos, por su condición, "no van a estar en nada".
El momento actual es "delicado y difícil" para la gobernabilidad debido a la proporción de escaños que hay en el Parlamento, aseveró. El presidente melillense cree que ahora se abre "un capítulo apasionante e interesante" y confió en que si se trabaja con lealtad y responsabilidad "puede ser una gran oportunidad para España". Imbroda instó a esperar a ver qué ocurre en las próximas semanas, dado que "el movimiento se demuestra andando".