{jaimage crop="ML" /}Una veintena de melillenses aprende esta técnica japonesa de la mano de Clive Witham. Las técnicas y terapias orientales parecen ser el último recurso de los melillenses en busca de una cura de sus dolencias. Ayer el Aula 10 de la UNED acogió la conferencia de Clive Witham, quien instruyó a una veintena de melillenses en una técnica que si bien se empezó a utilizar en Japón en el siglo XVI, no se ha extendido al mundo occidental hasta bien entrado el siglo XX. Melilla es una de las ciudades pioneras en la enseñanza de la llamada ‘terapia del martillo’, que utiliza un pequeño martillo de madera con una clavija, con el que se dan golpes en puntos energéticos del cuerpo para equilibrar las energías y aliviar las dolencias musculares que padezca el paciente.
El matrimonio formado por Clive y Mutsumi Witham lleva cinco años y medio viviendo en Melilla y desde entonces han tratado a decenas de melillenses a través de técnicas orientales, como la acupuntura, la acupresión y ahora la ‘terapia del martillo’.
Durante la charla, Witham explicó a los asistentes la historia de este tratamiento que empezó a recibir la familia imperial japonesa en el siglo XVI. Hasta la actualidad esta técnica únicamente se realizaba a un núcleo reducido de personas, siempre relacionadas con la realeza y la nobleza, pero ha sido hasta hace relativamente poco cuando su conocimiento se ha extendido en el mundo occidental. De hecho, Witham destacó que la charla de ayer en la UNED de Melilla es la primera que se ofrece en España sobre la aplicación de esta terapia.
La aplicación de golpes con este martillo en puntos determinados del cuerpo alivia las tensiones musculares y es útil, según explicó Witham, para prevenir otras dolencias derivadas de la acumulación de tensión muscular y conseguir una relajación corporal que permita aumentar la calidad de vida de los melillenses.