Queridísimos;
Tengo ante mí el libro del doctor Marañón (Tiempo Nuevo y Tiempo Viejo), que escribió don Gregorio en 1.940 y que dedicó "a sus amigos del diario a Nación", de Buenos Aires.
Como todo lo escrito por Marañón, tiene siempre actualidad, con independencia del tiempo en el que se lea. Aquello fue un tiempo viejo, dicen. Viejo en afanes, viejo en métodos. viejo en ilusiones, viejo en sus clases y estamentos... Vale, vale, pero ¿y estos que vivimos? ¿y estas azarosas horas pasadas? ¿y la contemplación de la "nueva política?" ¿No vemos acaso una muchedumbre, sí, una muchedumbre, de gentes gritadoras, alborotadoras, chismosas, discutidoras, parlanchinas y charlatanas?
Olvidan, tal vez, que el voto más sublime no es el de la castidad, sino el de silencio.
Lo malo es que esas gentes que representa lo más rancio del tiempo viejo, están encaramadas en lo más alto del gobernalle de la nación, si un timón tuviera altura. Lo malo es que estas gentes son el alba del tiempo nuevo que, según nos dicen, está al umbral de su nuevo día.
Todo bulle, en estos días iniciales del nuevo tiempo viejo, como una gusanera, como si no estuviera pasando nada en las últimas horas vividas. Son los mismos; los mismos aspavientos, igual chinchorrería, idéntica palabrería, las mismas palabras vacías. ¡todo tan mezquino!, ¡todo tan chico! Observo la misma receta apolillada, las menudas retóricas, hasta los mismos ardides de mal leguleyo que ni siquiera leyes sabe, como esos médicos que horrorizaban a Marañón, porque no entendían más que de Medicina.
¿No se os estremece el ánimo ante el silencio ominoso de los llamados intelectuales? ¿No son, acaso, gentes ridículas, henchidos de fatuidad y plenos de pedantería? ¿No veis con espanto que no se atisba en ellos ninguna hora de luz en esta hora de oscuridad, verdadero oficio de tinieblas? Esta turba infame, turba de nocturnas aves“, que ya cantó el gran Góngora (don Luis Miguel), mi poeta preferido, serán capaces de decir que la tierra es plana o negar la vigencia de la Alta Velocidad, antes de admitir la crepuscular hora de España.
Entonces este tiempo que dicen nuevo, ¿no estará repleto de gentes provistas de gafas de miopes, incapaces de ver alguna luz de esperanza en el lejano horizonte de España? Lo que no cabe en sus estrechos cráneos creen que no puede existir. ¡Encima tienen el desahogo de reírse con superioridad! ¡Pobrecillos!
¿Así que tiempo nuevo eh? ¡Pero si empieza otra vez la película! Película vista mil veces, con viejos actores, al parecer protagonistas del tiempo nuevo. Pero si vemos otra vez, ¡otra vez!, a los murmuradores, a los “snobs”, a los pijos, a los que siempre miran al sol que más calienta, pendientes del agradecimiento del ayer o por las esperanzas del mañana.
¿Tiempo nuevo? Memoria y memorial del tiempo viejo; recorrido de todos los protagonistas del tiempo viejo. Están todos; mezquinos, abigarrados, chillones, engolados, todos compactos en su misera pequeñez.
Da grima verlos hablar todos a un tiempo.
Los del tiempo nuevo, que son en realidad exponentes del tiempo viejo, están con eso que llaman parlamento, como un niño con juguetes nuevos, engollipados de votos y viendo su realidad vieja, con la linterna que de aquel lugar sale.
El tiempo nuevo asoma con todas las enfermedades y alifafes del viejo y con el inagotable resentimiento de aquel tiempo. Lo malo es que, como decía don Miguel de Unamuno, “entre los pecados capitales no figura el resentimiento y es el más grave de todos”.
Hace veinte años dejé escrito en otro sitio y por otra ocasión, que la violencia vengativa de los resentidos se hace patente cuando alcanzan el poder.
Yo sé por qué lo dije entonces y también porqué lo digo cuando clarea el tiempo nuevo, remedo del tiempo viejo.
Volvamos a don Gregorio; “el resentimiento es incurable; es más si el triunfo llega, puede tranquilizar al resentido, pero no lo cura jamás. Ocurre, por el contrario, que el “ triunfador”, el resentido, lejos de curarse, empeora. Porque el “triunfo” es para él como una consagración solemne de que estaba justificado su resentimiento.”
¿Dudáis que este tiempo nuevo es en realidad un tiempo viejo? ¡Pero si está la señora Montero (doña María Jesús) de vicepresidente cuarta del Gobierno!
Pero si está el señor Bolaños (don Félix), de ministro de Justicia, ¡¡¡ministro de presidencia y de relaciones con las Cortes)!!! La Trinidad hecha ministro.
¿Tiempo nuevo? ¡Pero, si de un momento a otro, mediante “médium”, naturalmente, aparecerán en el panorama el señor Azaña (don Manuel) y hasta el señor Gil- Robles y Quiñones (don José María), ¡si el Señor no lo remedia!
¿Tiempo nuevo? ¡Pero si es de aplicación aquel "España sin pulso“ del señor Silvela (don Francisco), allá por 1898 en el diario “El Tiempo“, en aquella terrible canícula del Desastre!
¿¡Cómo no vamos a estar en tiempo viejo si la exalcaldesa de Puertollano sigue siendo ministra?!
¿Cómo no vamos a estar en tiempo viejo, si el profeta Isaías nos sigue interpelando (Salmo IV); “Varones ilustres, ¿hasta cuándo seréis de corazón duro? ¿Por qué amáis la vanidad y vais tras la mentira?”
¿Cómo no vamos a estar en tiempo viejo si leo que “Mohamed VI y Sánchez “trabajarán juntos“?
¿Cómo no vamos a estar en tiempo viejo, si aparece enredando de nuevo el señor Arenas Bocanegra (don Francisco Javier, "Javie"), "nuevo" desde el pleistoceno de la política?
Aquí estamos, por obra y gracia de los que encabezan el tiempo viejo, convertidos en botín y en polvorín.
Lo peor es que acaba de empezar un “tiempo nuevo“, viejo y desde el principio caducado.
Os informo de los días más bizarros conmemorados recientemente
Lunes 20 de noviembre;
Día Universal del Niño, Día de la Industrialización de Africa, Día Internacional de la Memoria Transexual.
Martes 21 de noviembre;
Día Mundial de la Televisión, Día Mundial del Saludo, Día Mundial de la Pesca, Día Mundial del Vestido.
Miércoles 22 de noviembre;
Día de la Música, Día Internacional del Síndrome 2q11 (sic) (edición de noviembre ).
Jueves 23 de noviembre;
Día Internacional de la Palabra, Día Mundial de Fibonacci (sic), Día del Profesor de francés, Día Internacional del Asesor de Imagen, Día Mundial del Café Expreso.
Viernes 24 de noviembre;
Día Mundial de la Evolución, Día de no comprar Nada, Black Friday, Día Internacional del Ingeniero de Sistemas, Día Mundial del Vino Tinto.
Sábado 25 de noviembre;
Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Hoy domingo se celebran el Día Mundial del Olivo, Día Mundial contra el uso indiscriminado de Agroquímicos el Día Mundial del Acceso a la Educación Superior.
a) Sigue siendo de aplicación; la exalcaldesa de Puertollano sigue siendo ministra. Por mi padre (q.e.p.d.).
b) He reforzado mi plantilla de espías paraguayos con objeto de hallar donde para el disoluto Simón.
c) Por si lo sabéis, existe un ministerio de Transformación Digital. Lo digo para general conocimiento y aplicación.
Que no le falte agua al elefante.