El barrio Reina Regente, también conocido por barrio Cuerno por su pasado en el que las cabras pastaban por las laderas del monte de la restringida zona militar, es el poblado más alto de la Ciudad Autónoma de Melilla. Aunque se diferencia en tres zonas, en la parte más alta está la mezquita y su alminar de losetas blancas frente al fuerte o torreta de Reina Regente, es uno de los llamados ‘fuertes exteriores’ que constituían,antiguamente, el cinturón defensivo de la ciudad de Melilla por su dominio visual sobre todo el territorio y donde se encuentra el acuartelamiento de La Legión.
El Faro se desplazó hasta las inmediaciones de esta zona de la ciudad de Melilla para conocer cuál es la situación en la que se encuentran los vecinos del barrio de Reina Regente, y averiguar tanto los aspectos positivos como los negativos de este lugar de la ciudad de Melilla.
92 años y ex militar de La Legión, aprovechaba la visita de este medio al barrio para hacer hincapié en que todos los vecinos “son buenas personas”. Mohamed es de los vecinos más antiguos de Reina Regente, de los pocos que cuando todo era campo “dormía en el interior de las cuevas” que antiguamente existieron en lo que ahora se ha convertido en multitud de bloques de pisos. Ahora, vive junto a sus hijas y afirma que la relación vecinal “es cordial y se conocen todos”.
“Yo vivo aquí desde pequeño. Antes era militar de La Legión y dormía debajo de las cuevas que ahora son bloques de piso. La relación entre vecinos es buena, somos todo muy buena gente y a mi me gusta vivir aquí”, recalcaba el vecino melillense.
Faisa vino hace 9 años desde Tenerife a conocer a parte de su familia que no conocía, y desde entonces se ha quedado viviendo en el barrio de Reina Regente junto a su familia. Comenta a este diario que incluso ya tiene el acento melillense, y sobre el barrio subraya que la relación entre vecinos es buena “si te conocen”.
“Cuando vine hace nueve años aquí nadie me trataba como me tratan ahora, con ese respeto”, comentaba el vecino del barrio.
Zona abandonada
Los vecinos del barrio de Reina Regente se preguntan por qué el distrito de esta zona es uno de los más abandonados de la Ciudad Autónoma de Melilla cuando en otros barrios “han estado haciendo multitud de mejoras”. Además, recalcan la falta de oportunidades laborales, las cuales “no existen” para el vecindario e insisten en unas series de mejoras urbanísticas relacionadas con la limpieza, mantenimiento y zonas de juegos para los más pequeños del barrio como parques infantiles o pistas de fútbol sala.
El Faro fue testigo de las faltas de mejoras en este distrito melillense y sus vecinos piden al nuevo Gobierno local que se preocupen por el desarrollo de la zona para los más pequeños y para los vecinos sin oportunidades de planes de empleo.
Así pues, ante la compañía de Faisa, un vecino de barrio Cuerno, define que el distrito de Reina Regente se divide en tres zonas, y cada una de ellas se diferencia de la otra por la relación entre los propios vecinos. Para este melillense, la evolución del barrio va a peor y subraya que la gente más mayor del barrio “es la más educada que te vas a encontrar”.
“Poco a poco va evolucionando, pero lo que es la gente va a peor. Como en todos los barrios, tiene su parte buena y su parte mala. Los más educados son las personas mayores”, dijo.
Faisa, además considera que hay un abandono total en la parte alta de Reina Regente por la “cantidad de basura aglomerada y los escombros” que dejan los ciudadanos y del propio barrio en el barranco de Cabrerizas.
“Esta es la parte alta de nuestro barrio y si te das cuenta está todo lleno de escombro por las laderas de lo que era el antiguo río que ahora está seco. Aquí la gente aprovecha para venir a tirar los escombros de las obras de su casa, ya sea del propio barrio o gente de la ciudad”, señalaba Faisa.
Parques deteriorados
Otro de los aspectos negativos de Reina Regente es el deterioro en el que se encuentran sus dos pequeños parques, también situados en la parte alta. Ambos, instalados recientemente hace tres años, se encuentran llenos de basura por ser “un sitio donde vienen los vecinos a concentrarse por las tardes”.
Así lo destacaba Sufian, otro de los melillenses que vive en este barrio y que también acompañaba a este medio en las inmediaciones de este distrito de la ciudad de Melilla. Padre de familia, lleva años negándose a llevar a sus hijos al parque para que jueguen por “la suciedad y el descuidado que hay”.
“Yo aquí a mis hijos nunca los traigo a jugar. Me veo obligado a llevarlos a otras partes de Melilla porque no quiero que jueguen entre la basura”, resaltaba.
El propio Sufian insiste en preguntarse por qué su barrio es el más abandonado de Melilla. De esta manera, explica que “aquí las oportunidades laborales no existe para los vecinos”, y aclara que el desempleo en el barrio es uno de los más altos de Melilla.