La Delegación del Gobierno de Melilla ha elevado a 2.500 el número de migrantes subsaharianos que este miércoles, sobre las 9.30 horas ha protagonizado un asalto masivo al vallado fronterizo de Melilla.
Desde Delegación destacan "la gran violencia empleada por los migrantes", que iban provistos con garfios, palos y tornillería en los zapatos y que se han dedicado al lanzamiento de piedras.
De esta forma han conseguido rebasar a las fuerzas de seguridad marroquíes que trataban de impedir su llegada al vallado, añaden las mismas fuentes.
Asimismo destacan que gracias al amplio dispositivo de la Guardia Civil y a la colaboración de la Policía Nacional, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad españolas han neutralizado en gran parte el numerosísimo grupo de personas que ha intentado acceder a nuestra ciudad.
El salto se ha producido por las inmediaciones del arroyo de Villa Pilar, que permanecieron cortadas al tráfico por la Policía Local de Melilla.
En el momento de emitir este comunicado, el número de personas que habrían entrado a la ciudad sería de unos 500.
En la contención del salto tres guardias civiles han resultado heridos, en principio de consideración leve, y tres subsaharianos han sido atendidos por heridas leves a pie de valla.
Fuentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad consultadas por El Faro han asegurado que el de esta mañana puede ser el salto masivo más numeroso que se recuerda en la última década.
La delegada del Gobierno en Melilla, la socialista Sabrina Moh, ha reconocido que éste es el salto más numeroso a Melilla desde que ella está en el cargo.
Las alarmas saltaron en Melilla sobre las 9:00 horas, cuando numerosos vehículos policiales se dirigieron hacia la frontera de Beni Enzar. Desde ahí los migrantes se desplegaron hacia la zona que está entre Barrio Chino y Farhana, donde al menos una docena quedó encaramada a la doble alambrada.
Imágenes grabadas por El Faro muestran a migrantes heridos, con sangre en la cara. Muchos de ellos accedieron a la ciudad al grito de ¡Bossa! Incluso alguno envió un saludo a su madre diciendo: "Mamá, te quiero".