Óscar bajo los palos; Paulo, Hamed, Nico, Fran y Adams en la defensa; Mauricio, Ortega y Mario en el medio del campo; Omar y Ramon conformaban el ataque unionista. El primer transcurso del partido fue bastante intenso, con ambos juveniles disputando el esférico al cien por cien. Pese a ello, los nazaríes gozaban más del esférico y buscaban la ruptura de la zaga unionista.
Después de un saque de banda, los granadinos se adelantaron en el esférico gracias a un golazo por la escuadra de Mauro Salazar. Aunque golpearon primero, los melillenses no quisieron bajar los brazos y buscaban el empate. En el minuto 30, después de una jugada por banda, Ramón igualó el encuentro con un golazo desde la frontal del área. Tal disparo fue tan ajustado y potente que fue imposible para el meta nazarí. Ya con el resultado en tablas, tanto granadinos como melillenses querían ir con ventaja antes del descanso. Óscar sacó a gala sus guantes con dos intervenciones majestuosas que impidieron el 1. No obstante, en el minuto 42, tras una falta lateral, los rojiblancos se adelantaron de nuevo con un remate muy vago de Adrián Valenzuela que se coló en la portería.
Un detalle que pasó por alto en el gol fue que, en el momento impacto, el balón estaba fuera de la línea; cosa que los colegiados no estimaron. La dinámica del segundo tiempo fue diferente. Los granadinos pusieron más intensidad sobre el césped que los unionistas. Intensidad que los de Ali Amar equipararon y conseguían jugar de tú a tú al filial nazarí.
Pese al orgullo melillense de igualar el juego que los nazaríes propusieron, no lograron parar la granada mecánica a partir del minuto 70’. Después que los visitantes se quedasen con uno menos tras una entrada desmedida de Robin a Ramón, los rojiblancos apostaron por un juego más directo y menos posesivo. Ello es que vino el 1-3 en el marcador a servicio de Juan Antonio Gris tras culminar una contra. En cuestión de dos minutos, en el 80’ y 81’, ampliaron por doble la ventaja con los goles de Emilio Escribano y Hugo López; sentenciando a los unionistas en una derrota para olvidar.