El presidente del Instituto de las Culturas y el delegado del Gobierno asistieron a la inauguración de la cuarta edición de estas conferencias de investigación rifeña.
La memoria sefardita en el norte de África es el eje central de las cuartas Jornadas de Estudio e Investigación del Rif que ayer se inauguraron en el Aula 10 de la UNED a cargo del presidente del Instituto de las Culturas, Abdelmalik El Barkani, y los coordinadores Mohatar Mohatar y Ángel Castro, y a la que asistió también el delegado del Gobierno en Melilla, Antonio María Claret.
El primero en abrir el ciclo de conferencias fue el doctor en Antropología de la Escuela de Altos Estudios, Mohatar Mohatar, quien disertó sobre el devenir de la comunidad hebrea en el norte de África. Un judaísmo marroquí que disfrutó de largos periodos de convivencia armoniosa con la religión islámica, pero en cuya historia también se intercalan episodios de “odio y persecución”. No obstante, la multiculturalidad e interreligiosidad que ha sido característico en el norte de África ha marcado de alguna manera la idiosincrasia de las comunidades que han convivido en esta zona durante siglos.
Sin embargo, según el doctor en Antropología, la historia de la comunidad sefardí en el norte de África parece que tiene los días contados pues, hoy día, únicamente persiste una comunidad hebrea de unos cuantos miles de personas, las cuales mayoritariamente son ancianos cuyos hijos han emigrado al extranjero, por lo que Mohatar creer que, con el paso de los años, la comunidad sefardí irá casi desapareciendo.
Además, esa emigración de judíos marroquíes, en opinión de Mohatar, “ha conseguido sobrevivir fuera de sus fronteras”, y de hecho, hoy día, en Israel, que tiene una población de seis millones de personas, cuatro son judíos inmigrantes y más de medio millón son procedentes de la zona marroquí.
Un legado de la Edad Media
Sin embargo, la presencia de la comunidad sefardí en el norte de África se remonta documentalmente a la Edad Media y, en este sentido, Mohatar explicó que en Fez confluyen dos corrientes de pensamiento coetáneas como son el islámico y el hebreo.
Además, en años posteriores conversos y andalusíes son acogidos en la zona marroquí y, de hecho, son exiliados granadinos los que refundan la ciudad de Tetuán, donde se instala también una comunidad sefardí tan importante que incluso se denominó a la ciudad ‘la pequeña Jerusalem’.
Así comenzó la primera de las conferencias de las jornadas a las que le siguió la intervención del escritor Tomás Ramírez quien destacó otro de los legados sefardíes en la zona del Rif como es la persistencia del dialecto hispaño-hebraico. La última intervención correspondió a la investigadora Sandra Rojo, de la UGR, quien disertó sobre ‘El devenir de una familia melillense sefardita’.
Para la tarde de hoy, a partir de las 17:30 horas, se espera la ponencia del realizador Juan Luis De No, quien hará ‘Una propuesta para la gestión del material rifeño’. A las 18:00 horas la mujer volverá a ser la protagonista de las Jornadas del Rif con la conferencia de la investigadora Sonia Gámez sobre la religiosidad en la Guelaya.
Posteriormente se presentará el libro ‘Huria, mar memoria’ y se proyectará la película ‘La vida perra de Juanita Narboni’ en el Salón de Actos de la UNED a partir de las 19:30 horas.