La compañía Eulen llevará a cabo el mantenimiento de las estructuras que separan las zonas fronterizas de Melilla y Ceuta con Marruecos, tras agenciarse un contrato del Ministerio del Interior por un valor de 4,1 millones de euros a ejecutarse durante los venideros dos años.
El presupuesto ha sido dividido en dos lotes: poco más de 2,3 millones han sido destinados para las acciones en territorio melillense y más de 1,7 para las instalaciones ubicadas en Ceuta. Con esos montos deberá garantizarse el mantenimiento preventivo y correctivo de los kilómetros de valla a lo largo de las dos Ciudades Autónomas.
Con dicho acuerdo se establece que la empresa revisará y reparará espacios como los centros de mando y control, puestos de patrullas, además de la red de alumbrado, vallados y equipos de campo con tecnología informática.
Además, comprobará el funcionamiento de máquinas, efectuará inspecciones de rutina, redactará informes relacionados con el seguimiento al mantenimiento, ejecutará servicios de limpieza y desinfección y gestión de residuos, además de reparar averías.
Mediante este pacto, se busca sostener los trabajos que impidan la entrada de inmigrantes de manera irregular.
Las estadísticas indican que 929 personas han arribado a Melilla a través de la valla desde enero hasta la mitad de abril, lo cual implica un aumento del 241% en relación con el mismo lapso de tiempo correspondiente al 2021, cuando llegaron 272.
El 2 de marzo pasado se produjo un salto masivo mediante el cual más de dos mil subsaharianos intentaron entrar a territorio español. Al respecto, la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, declaró que "desde que estoy en la Delegación del Gobierno no ha habido un intento de salto tan numeroso”. En efecto, fue ese el suceso más multitudinario que se recuerda en la historia de los asaltos a la valla en la región.
Al día siguiente se produjo una acción similar que dejó varios policías heridos. Se estima que en esa última ocasión hayan conseguido acceder a la ciudad alrededor de 350 personas.