La Policía Nacional ha desmantelado una organización criminal dedicada al tráfico de cocaína en Melilla, en el marco de la Operación Gallos. Seis personas han sido detenidas, cuatro de ellas menores de edad, en un operativo llevado a cabo en el barrio de Cañada Hidum, donde la red operaba con total impunidad.
La intervención policial ha permitido la incautación de cincuenta dosis de cocaína preparadas para su venta, dinero fraccionado, una carabina de aire compromido y dos armas blancas de gran tamaño conocidas como cortacañas.
Demanda ciudadana
La operación policial se desarrolló como respuesta a las denuncias de los vecinos del barrio de Cañada Hidum, quienes alertaban sobre la creciente sensación de inseguridad debido a la presencia de puntos de venta de droga en la zona. Según las investigaciones, la red criminal empleaba a menores para la vigilancia y distribución de la sustancia estupefaciente, lo que facilitaba su comercialización y acceso a consumidores, incluidos jóvenes.
El operativo fue llevado a cabo por el Grupo de Pequeño Tráfico de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO), en el marco del Plan Estratégico de Lucha contra la Delincuencia Urbana y el Narcotráfico. Tras semanas de vigilancia, los agentes lograron identificar las rutinas de los implicados y los llamados aguadores, individuos encargados de avisar sobre la presencia de la policía en la zona.
Operación Gallos
El 26 de febrero, agentes de la UDYCO llevaron a cabo un registro en un local de Cañada Hidum, utilizado como punto de distribución de droga. En el lugar, los agentes encontraron múltiples dosis de cocaína listas para su venta, además de armas y dinero en efectivo procedente del tráfico de estupefacientes.
Durante la intervención, los policías fueron atacados con objetos contundentes lanzados desde distintos puntos del barrio. Entre los proyectiles empleados por los agresores se encontraban discos de pesas, vidrios, piedras y tubos de hierro. La actuación policial permitió la detención de varios implicados en el ataque, quienes enfrentan cargos por atentado a la autoridad y daños a vehículos policiales.
Según fuentes policiales, este grupo criminal actuaba sin restricciones en la zona, distribuyendo cocaína en pequeñas dosis por un precio de cinco euros. Este modelo de negocio facilitaba el acceso a la droga para consumidores habituales y jóvenes en riesgo.
Además, los menores empleados en la organización desempeñaban tareas de vigilancia, seguridad y distribución, evitando levantar sospechas y dificultando la labor de las autoridades. La investigación permitió identificar a estos menores y constatar su papel dentro del entramado criminal.
La desarticulación de este grupo es un nuevo golpe contra el tráfico de drogas en Melilla, donde las autoridades han intensificado su lucha contra el narcotráfico en los últimos meses.
Futuras actuaciones
Las seis personas detenidas han sido puestas a disposición judicial. Mientras que los cuatro menores han sido entregados a la Fiscalía de Menores, los dos adultos podrían enfrentarse a graves cargos relacionados con la venta de droga y la participación en una organización criminal.
Desde la Jefatura Superior de Policía de Melilla han reiterado su compromiso en la lucha contra el narcotráfico y han destacado la importancia de la colaboración ciudadana para identificar y desmantelar este tipo de redes.
La Operación Gallos es parte de un plan estratégico más amplio que busca erradicar los puntos de venta de droga en la ciudad, con especial atención en barrios afectados por este tipo de delincuencia.
El impacto de la droga en los barrios
El tráfico de drogas no solo genera problemas de salud pública, sino que también alimenta la delincuencia y la inseguridad en los barrios donde se desarrolla. En este sentido, los vecinos de Cañada Hidum han expresado en reiteradas ocasiones su preocupación por la actividad de estos grupos y el impacto que tienen en la comunidad.
Las autoridades han señalado que la lucha contra el narcotráfico debe ir acompañada de medidas sociales y educativas, que eviten que los jóvenes sean captados por estas organizaciones criminales.
La desarticulación de este grupo criminal en Melilla supone un importante avance en la lucha contra el narcotráfico, especialmente en zonas vulnerables como Cañada Hidum. La intervención policial no solo ha permitido retirar del mercado una importante cantidad de droga, sino que también ha puesto de manifiesto la violencia con la que operan estos grupos y la necesidad de seguir combatiéndolos con firmeza.
Las investigaciones continúan abiertas y no se descartan nuevas detenciones en los próximos días. Entretanto, las fuerzas de seguridad mantienen la vigilancia en la zona para evitar que otros grupos ocupen el espacio dejado por la organización desmantelada.