La Guardia Civil ha detenido al conductor de un turismo que llevaba un total de 19,70 kilogramos de hachís oculto en un doble fondo practicado en el depósito de combustible del coche, según han afirmado fuentes oficiales del instituto armado. La actuación ocurrió durante la noche del pasado día 30 de diciembre de 2022, tras la identificación del conductor y único ocupante del vehículo Seat León con placas nacionales en los registros previos al embarque de los vehículos con destino a Málaga.
Tras una primera inspección visual, la fuerza de servicio se apercibió que los asientos traseros habían sido manipulados. Por tal motivo, se efectuó una segunda y más exhaustiva inspección con la ayuda del perro del Servicio Cinológico de la Guardia Civil, que sin género de dudas marcó la misma zona que previamente levantó sospechas a la fuerza actuante.
Al encontrarse la fuerza de servicio ante en un posible positivo, conocido en el argot policial como un potencial portador de sustancia estupefaciente, el equipo especializado en registros de la Guardia Civil del Puerto observó que el depósito de combustible que se encontraba bajo los asientos traseros se encontraba manipulado.
Una vez extraído el sillón trasero de su lugar natural, se pudo acceder al depósito por su parte superior, donde se localizó en su interior, un total de treinta y cuatro (34) paquetes de tamaño similares y que por su textura y color, pudiera tratarse de polen de hachís.
La droga intervenida, arrojó un peso total de diecinueve con setenta kilogramos (19,70 kg), alcanzando un valor de cuarenta mil ochocientos euros en el mercado ilegal, según las tablas actuales que emite la OCNE (Oficina Central Nacional de Estupefacientes).
Detenido por supuesto delito de tráfico de drogas
El ocupante del vehículo, un varón de 19 años, de nacionalidad española, ha sido puesto a disposición judicial en calidad de detenido como supuesto autor de un delito contra la salud pública, en su modalidad de tráfico de drogas, junto a la droga intervenida y el vehículo utilizado en la comisión del ilícito penal.
Con esta actuación, la Guardia Civil evita la distribución y comercialización en el mercado ilícito del orden de “setenta y ocho mil ochocientas dosis”
de este tipo de estupefaciente.