Adiós a los libros de texto convencionales, a los horarios por asignaturas y a las aulas tradicionales. La enseñanza rígidamente compartimentada desaparece y es sustituida por seminarios, talleres y proyectos, en los que el alumnado adquiere conocimientos de manera transversal. La Salle ‘El Carmen’, parte de la red La Salle que en España y Portugal cuenta con 120 centros, engloba estos cambios bajo el Nuevo Contexto de Aprendizaje (NCA), un modelo pedagógico propio, fruto de la reflexión y la investigación, que responde a las demandas de la sociedad de hoy.
NCA supone un cambio estructural y global de la cultura de la escuela. Rompe las barreras de la educación más convencional, incluidas las físicas. Desplaza el foco de la enseñanza al aprendizaje de forma experiencial con el objetivo de fomentar la motivación y la comprensión, así como la construcción del ser en su integridad. Y como otro elemento diferenciador, incluye un renovado sistema de evaluación que, junto a las habituales notas numéricas que cumplen con los criterios exigidos por cada Administración, añade una valoración de la evolución de las destrezas (científico-matemáticas, tecnológicas, humanísticas, artísticas…), potencialidades y capacidades. Un sistema integral de evaluación que ofrece una visión más global del alumnado.
NCA ya es una realidad en La Salle ‘El Carmen’ de Melilla en las etapas de Infantil y del primer curso de E. Primaria, completando su implantación hasta la universidad en todos los centros La Salle en el curso 2025-2026.
En su nuevo manejo del espacio y el tiempo, la estructura organizativa da paso a jornadas en las que tienen cabida todas las materias a través de distintas actividades. La distribución por asignaturas tradicionales deja paso a los Ámbitos de Aprendizaje.
Este innovador modelo prescinde de los libros de texto convencionales, y los sustituye por materiales didácticos de elaboración propia, que combina con soportes audiovisuales y otros formatos. Estos materiales permiten la rápida actualización del contenido para responder al contexto presente.
La Salle está viviendo una profunda transformación interna con la implantación del NCA. Los cambios alcanzan tanto a la formación del profesorado, en la que se ha invertido una media de 50 horas por educador, como a la remodelación interior de los centros de forma progresiva, donde se trabaja en los llamados paisajes educativos, que lleva al rediseño de las aulas.
Valoración de Jesús Félix Martínez, director de la Red de Obras Educativas La Salle
“Sentimos que nuestro nuevo modelo pedagógico conlleva una profunda revolución de la educación, en la que el alumnado aprende más y mejor por asumir el rol de protagonista en el proceso. Educar desde el contexto aumenta la comprensión de aquello que se vive y fomenta el compromiso de los alumnos y alumnas. Estamos muy satisfechos con los resultados. Comprobamos que ha mejorado la motivación y el aprendizaje de los alumnos”.
“NCA es un cambio de cultura organizacional, tanto en las aulas como en toda la institución y nace de aunar la tradición con la innovación lasaliana. No educamos para el futuro, sino para el hoy, pensando que las herramientas con las que dotamos a nuestros alumnos les servirán para transformar la sociedad”.
Sobre La Salle
La Salle es una institución implantada en ochenta países que se dedica a la educación basada en los valores humanos y cristianos. Entre sus objetivos se encuentra el de potenciar el desarrollo de capacidades para que lleguen a ser personas autónomas, competentes, creativas e implicadas en la construcción de una sociedad más justa y solidaria. Como institución está abierta al entorno y atenta a las demandas y necesidades del mundo educativo, laboral y empresarial, así como comprometida en llevar adelante su proyecto como comunidad educativa. Para ello cuenta con un equipo de profesionales competentes enfocados en la mejora continua y la innovación.
Los centros La Salle reciben su nombre de San Juan Bautista de La Salle quien, a finales del siglo XVII se asoció con unos maestros para mantener escuelas dedicadas a los niños pobres. Con ellos fundó el Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas.
Juan Bautista y estos maestros, viviendo y reflexionando juntos, llegaron a compartir un mismo espíritu que llenaba de sentido su tarea educadora. Aquellos maestros se convirtieron en Hermanos, personas que se consagran a Dios en comunidad y se comprometen a vivir juntos y por asociación al servicio educativo de los pobres.