El secretario general de SATSE en Melilla, el Sindicato de Enfermería, Carlos García Cano, aseguró que el personal del Hospital Comarcal está “decepcionado porque ve cómo vuelve a comenzar todo de nuevo y que no cambian las cosas”. Por ello, informó a El Faro de que sus compañeros de profesión le trasmiten esa decepción y también el cansancio y a la espera de que se cree más infraestructuras que son necesarias.
García Cano remarcó que el personal está decepcionado porque no se termina de habilitar otro espacio físico en el que poder atender a los melillenses en mejores condiciones. Explicó que el Comarcal ya no se puede ampliar más y se precisan de esos espacios nuevos.
El representante de SATSE comentó que se ha aumentado el personal en las plantas para atender a los enfermos, pero el hospital tiene ese espacio limitado y no está preparado para que haya ese número de personas a las que haya que dar dicha atención.
“No hay espacios en Urgencias ni UCI ni en las plantas”, aseveró García Cano, que insistió en la necesidad de contar cuanto antes con el hospital universitario.
Pero el secretario general de SATSE lamentó que lo peor de esta situación es que no se ha hecho en este año un hospital modular, para reforzar la falta de espacio del Comarcal, y aún “sigue sin hacerse”. En este sentido, subrayó que “ni se le ve ni se le espera”.
La vacunación
García Cano comentó que aún no se han vacunado todos los sanitarios con la pauta completa, es decir, que hayan recibido las dos dosis de vacunas contra la Covid-19. Aún faltan profesionales por recibir estas dosis, según los datos que tiene SATSE.
Y en este sentido, mostró su disconformidad con que no se están facilitando las cifras de personas vacunadas por los diferentes sectores por parte de las autoridades.
El sindicato resaltó que el personal sanitario que estuvo de baja durante estos meses han recibido más tarde las dosis. Esto ha retrasado que tengan la pauta completa de vacunación, añadió García Cano, que ya denunció que a los compañeros que estaban en esta situación no se les estaba llamando para poner la vacuna cuando luego, con el paso de las semanas o días, se iban a reincorporar a sus trabajos en el hospital o los centros de salud. Ya se avisó de que se iba a dar esta circunstancia y había personas que podrían haber contado con la vacuna antes porque no era incompatible con su baja
SATSE desconoce también si esto afecta más a unos trabajadores que a otros, es decir, si faltan más sanitarios por vacunar en el hospital o en los ambulatorios porque no se facilitan esas cifras desde las autoridades, como por ejemplo, el Ingesa.
Esta Melilla como para ir a vacunarse madre de dios
Ya les digo yo, que falta personal por vacunar. Los alumnos de prácticas de enfermería de tercer curso, que hacen exactamente los mismos turnos que sus tutores, por tanto con el mismo riesgo de contagio.
Están totalmente abandonados a su suerte por parte de Salud Pública, porque según me consta, la Facultad ha enviado listados con los datos de los alumnos y demandado en tiempo y forma la vacunación como el resto de alumnos de enfermería de toda España. O acaso Melilla no es España. Yo creo que sí.
Ya no sabemos a quién acudir. Hemos intentado contactar con Salud Pública y dan la callada por respuesta.
Con la incidencia más alta de toda España a día de hoy, esperemos no tener que lamentar ningún problema grave con estos alumnos, que con esta enfermedad nunca se sabe. LAMENTABLE
No me extraña