La Policía Nacional de Melilla ha detenido a un hombre que fue sorprendido forzando un coche en la calle Carlos Ramírez de Arellano.
Los hechos se produjeron sobre 3:35 horas de la madrugada del pasado lunes, cuando los agentes del Cuerpo Nacional, que realizaban funciones de Seguridad Ciudadana, recibieron el aviso de la Sala de Operaciones del 091 para que se dirigieran a Ramírez de Arellano donde varias personas habían sorprendido y retenido a un hombre cuando intentaba forzar un coche aparcado en la vía pública
A pesar de la pronta respuesta policial, el individuo se zafó de los ciudadanos que le retenían y huyó antes de que llegara la Policía. En cuanto llegó el radiopatrulla al lugar, entrevistó a con varios testigos, que les facilitaron las características físicas del autor de los hechos.
En colaboración con otro indicativo, el ladrón fue localizado poco después en una calle aledaña y, en su cacheo, se le ocupó entre sus ropas un destornillador, unas tijeras, dos guantes de goma y una linterna (objetos idóneos para violentar vehículos de noche y sin dejar huellas).
Los agentes actuantes localizaron al propietario del vehículo forzado para que efectuara la denuncia en Comisaría, mientras que el detenido pasó a disposición judicial en la mañana de ese mismo día.
Los robos con violencia disminuyeron en Melilla el año pasado casi un 40% respecto a 2021 y un 67% respecto a 2019, según el Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior. Y eso se nota en la calle porque lo que era parte de paisaje de la ciudad en 2012, once años después es más bien un caso aislado.
En total, la criminalidad convencional creció un 6,4% en la ciudad el año pasado, si lo comparamos con el ejercicio anterior (2021), pero si lo comparamos con el año previo a la pandemia, vemos que se ha producido un descenso importante del 67%.