Ahora que ya pega fuerte el calor y que la playa se convierte en el lugar favorito de los melillenses, es más que oportuno que la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) haya salido públicamente a recordar a todos los ciudadanos que la protección solar es base para la prevención del cáncer de piel. Y apunta que en 2024 fueron 26 lso casos diagnosticados con este patología, lo cual es una cifra muy importante y que se debe rebajar en todo lo posible por las dramáticas consecuencias que esta enfermedad tiene para quienes la padecen y para sus propios familiares.
Es muy oportuno que la AECC nos dé ese toque de atención, precisamente cuando el pasado viernes se conmemoró el Día Mundial contra el Cáncer de Piel, considerado como uno de los más frecuentes pero también uno de los más prevenibles y detectables a tiempo si tomamos las precauciones oportunas. Es imprescindible el uso del protector solar, tanto al llegar a la playa o a la piscina como después de cada baño. Y hay que tener en cuenta que no valen valores por debajo del factor 50, según recomiendan los expertos de la AECC, máxime en el caso de los niños y los bebés. Incluso si no se va a tomar el sol, hay que poner la protección, siempre y sin excusas.
Esta asociación, que fue Medalla de Oro de la Ciudad Autónoma de Melilla en 2024, tiene muy claro que ese tipo de cáncer se puede evitar, que solo hay que tomar medidas tan simples como echar la crema sobre la piel y también importante, no exponerse a los rayos solares en las horas centrales del día, que son las peores desde el punto de vista de la emisión de los rayos uva, tan dañinos para los humanos.
La AECC, de todos modos, iniciará en cuestión de semanas su campaña anual contra el cáncer de piel. Sus profesionales se dedicarán a concienciar sobre el uso de los protectores y también examinarán algún que otro lunar extraño. Lo harán en las propias playas en lo que es una buena forma de tratar de que los ciudadanos sean conscientes del peligro de la exposición al sol y tomen las consecuentes medidas preventivas.
La labor de la AECC es de gran interés en lo que a visibilizar esta enfermedad se refiere, poner sobre la mesa importantes reivindicaciones para ampliar la investigación de la comentada patología y, fundamentalmente, esencial para los enfermos de cáncer y sus familias, a los que acompañan, informan y cuidan como solo sus voluntarios saben hacer.