El consejero de Turismo, Miguel Marín, se mostró este martes “muy positivo” respecto a la llegada de turistas este verano a Melilla en consonancia con lo expresado días atrás por los guías de la ciudad autónoma.
Como muestra, un botón: no hay más que ver, dijo, la evolución de la ocupación hotelera de las últimas semanas, con algún fin de semana completo en casi todos los alojamientos. Se trata de algo que no ocurría hace tiempo y que Marín ve como un signo positivo de que los tiempos están cambiando.
A ello, añadió, se le suma el hecho de que la comercialización de los bonos turísticos va en aumento y Marín espera que los resultados sean palpables durante la temporada estival. Además, el consejero se mostró convencido de que esa es la línea que deben seguir.
El del fomento del turismo es, precisamente, uno de los puntos incorporados en el convenio de colaboración firmado este martes entre la Ciudad Autónoma, por medio de Miguel Marín, y la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME), mediante su presidente, Enrique Alcoba.
Dentro de ello, se prevé el acompañamiento de los dirigentes de la CEME a las ferias o congresos nacionales o internacionales en los que participa el Gobierno autonómico, así como diversas acciones de atracción para ejecutivos y profesionales del sector, con el fin de que puedan conocer Melilla y vender sus bondades en sus países de origen. Todo ello se enmarca dentro del plan de colaboración público-privada al que se refirió Marín durante la firma del acuerdo.
La aduana y el régimen de viajeros
Durante la comparecencia ante los medios, Alcoba también reiteró, como había declarado hace unos días a El Faro, cinco años después de la reapertura de la aduana comercial, que esta no es tal, al menos como lo que se entiende convencionalmente o como lo que se disfrutó aquí hasta el 1 de agosto de 2018, cuando Marruecos la cerró unilateralmente hasta mediados de enero de este año.
En su opinión, la causa es clara: no se puede considerar aduana a algo en lo que no se puede trabajar en todos los sectores -puesto que actualmente se exportan poco más que electrodomésticos- y en la entrada de camiones de pescado está limitada y la de verduras es inexistente. “No es la aduana que queremos, que es una libre para cualquier empresario y donde se pueda exportar cualquier día de la semana y desde cualquier sector”, añadió.
Con todo, tal como llevan repitiendo los empresarios desde hace casi siete años, la aduana es algo necesario y que Melilla tuvo durante más de 70 años, pero lo realmente importante es recuperar el régimen de viajeros en las dos direcciones y no como está ahora, cuando no se puede meter nada a Marruecos y sí de todo -con limitaciones en cuanto a la cantidad- a Melilla.
Para el presidente de la CEME, el régimen de viajeros es lo que “funciona” y lo que revitaliza el día a día de la ciudad autónoma. En este sentido, Alcoba opinó que no se puede limitar las compras a nadie que venga a Melilla ni es de recibo que la Gendarmería marroquí requise los regalos que un ciudadano marroquí quiera llevar a un familiar en su país.
En cualquier caso, sí ha admitido Alcoba que tanto el Ejecutivo central como la Unión Europea (UE) deberían hacer algo para obligar a Marruecos a normalizar el intercambio de mercancías, tal como prometió el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Las importaciones
Por otra parte, el presidente de la CEME ha reclamado que pueda pasar de todo -básicamente pescado, fruta, verdura, y áridos- a través de la frontera para abaratar los costes de producción, que se incrementan exponencialmente cuando todo ello procede de la península debido al precio del transporte.
“Cuando sube un artículo por los costes laborales, logísticos, de transporte e impuestos, luego es muy difícil que baje”, ha reconocido, sin embargo, Alcoba.
Marín Alcoba, Alcoba Marín vende humos. Como se la han colao a los contribuyentes y a sus familiares con los bonos turísticos!!! Ineptos dirigiendo a su antojo. Disfrutad Melillenses de la sopa boba que abunda.