“Antes de empezar, que mis palabras vayan primero para recordar a todas las mujeres que han sido asesinadas por violencia de género.” Así comenzó su intervención Fadwa Abdelhadj, viceconsejera de Igualdad y Mujer de la Ciudad Autónoma de Melilla, durante la presentación del programa de actividades con motivo del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Abdelhadj mencionó el reciente asesinato de Zahra, una mujer de 47 años, en la localidad de Moguer (Huelva), elevando a 34 el número de mujeres asesinadas en lo que va de año y a 1.329 desde que comenzaron los registros oficiales en 2003. También recordó a los tres menores asesinados en casos de violencia vicaria. “Las mujeres víctimas necesitan más que palabras. Necesitan hechos. Necesitan protección seria y rigurosa, que ponga la seguridad y la vida de la mujer por encima de todo sin escatimar recursos materiales ni humanos”, remarcó.
Este es, precisamente, el eje de la campaña institucional que ha lanzado la viceconsejería bajo el lema “Más que palabras”. Una frase breve, pero cargada de significado, que pretende lanzar un doble mensaje: por un lado, la exigencia de compromisos reales más allá de los discursos; y por otro, la necesidad de poner el foco en el lenguaje como origen de muchas formas de violencia.
Durante su intervención, Guiomar de los Planes, responsable creativa de la campaña, explicó con claridad el concepto que ha inspirado esta iniciativa. “Toda violencia comienza en el lenguaje. Lo que decimos, lo que nombramos, lo que hablamos… en múltiples ocasiones son más que palabras”, afirmó. La campaña pone especial atención en las expresiones que pueden constituir el primer paso hacia formas más graves de violencia. "Antes del golpe, antes del control, antes de la amenaza, hay una palabra. Una palabra que humilla, que degrada, que culpabiliza, que silencia; una palabra que deja una marca invisible y que poco a poco se convierte en miedo, en culpa y en sometimiento", describió. Según explicó, muchas frases que se pronuncian desde el desprecio, el control o el insulto no se reconocen como violencia, en ocasiones incluso son acompañadas y envueltas de ironía o sarcasmo. Así, esta campaña focaliza sobre la violencia verbal, mirando de frente la raíz. "Una frase que parece sin importancia, pero es el principio de todo y es el principio que comparten todas las violencias, la violencia verbal", resaltó.
Por eso, la propuesta gráfica de la campaña muestra imágenes impactantes con palabras como “inútil”, “loca”, "ignorante", "zorra" o “mala madre” marcadas en la piel de mujeres, simbolizando las heridas emocionales que deja el maltrato verbal, dejando "huellas profundas, imborrables". Con esta propuesta visual, expuesta ya en la calle Cándido Lobera mediante paneles informativos, la campaña busca despertar la conciencia social y visibilizar que el lenguaje puede ser el primer escalón de una escalera que termina en la violencia física. "Queremos que la sociedad entienda que el lenguaje no es neutro, que tiene un poder, que puede ser un arma que si no sabemos utilizar puede llegar incluso hasta matar", añadió Guiomar de los Planes. Por ello, “aprender a hablar con respeto también es una forma de prevenir la violencia”, subrayó, insistiendo en la necesidad de reconocer para identificar y prevenir. En este sentido, la campaña visual presenta diez tipos de violencia (psicológica, emocional, económica, verbal, sexual, digital, social, laboral, vicaria y física); diez rostros diferentes acompañados de frases y palabras que originan esas violencias.

Bajo el paraguas de esta campaña, la Ciudad Autónoma ha preparado un completo programa de actividades durante todo el mes de noviembre. Las acciones están dirigidas a diferentes públicos y tienen un enfoque educativo, participativo y cultural. Ya se han iniciado los talleres "Amores Sanos" en los Centros Educativos de Primaria de la ciudad, impartidos por el educador Miguel Frías, conocido entre los escolares como “el pelirrojo de las charlas”. También se proyectará en centros de secundaria el cortometraje “Mi marido sale de trabajar a las seis”, dirigido por Óscar Toribio.
El 15 y 16 de noviembre tendrán lugar los paseos conscientes “Melilla entre historia y mujeres valientes”, una actividad guiada que recorrerá enclaves históricos de la ciudad vinculados al papel de la mujer. La agenda también incluye eventos culturales como el teatro inmersivo “Las voces silenciadas”, que se representará los días 19 y 20 en la UNED, y el fallo del XI certamen “Clara Campoamor”, previsto para el día 21 en el Salón Dorado del Palacio de la Asamblea, este año, sin condiciones de edad para participar.
Uno de los actos centrales será la X Marcha para la Eliminación de la Violencia hacia la Mujer, el próximo 23 de noviembre. Comenzará con reparto de camisetas a las 10:30h en el Parque Forestal “Juan Carlos I” y saldrá a las 11:30h. El 25 de noviembre se celebrará una lectura del manifiesto institucional y un minuto de silencio a las 12:00h en la puerta del Palacio de la Asamblea.
Este año, se han programado también talleres de autodefensa femenina el 29 de noviembre con sesiones prácticas dirigidas por Jorge Martínez Guzmán, Subinspector de Policía Nacional. Además, del 29 al 30 de noviembre y el 6 de diciembre se desarrollará el teatro infantil “La guarida itinerante”, dirigido por Ceres Machado, en diferentes barrios de la ciudad.
La campaña “Más que palabras” no solo busca denunciar, sino también educar y prevenir. Está pensada para llegar a todos los rincones de la sociedad melillense: centros escolares, calles, instituciones, medios de comunicación y ciudadanía. “Queremos que toda la sociedad entienda que acabar con esta lacra es un deber colectivo”, afirmó la viceconsejera. En palabras de Guiomar de los Planes, “cuando cambia la palabra, cambia la realidad”. Una frase que resume el espíritu de esta campaña, que apuesta por combatir la violencia desde la raíz: las palabras que se dicen, las que se permiten, las que se repiten sin cuestionar.
El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer fue establecido por Naciones Unidas en 1999 en honor a las hermanas Mirabal, tres activistas dominicanas asesinadas el 25 de noviembre de 1960 por oponerse a la dictadura de Trujillo. La fecha busca visibilizar las múltiples formas de violencia que sufren las mujeres en todo el mundo y promover acciones para erradicarlas.
Según datos de la ONU, una de cada tres mujeres en el mundo ha sufrido violencia física o sexual en algún momento de su vida. Por ello, cada 25N se convierte en un llamado global a los gobiernos, instituciones y sociedad civil para trabajar juntos en la construcción de un mundo más justo y seguro para las mujeres y niñas. En España, el Ministerio de Educación y Formación Profesional se suma cada año a esta jornada con propuestas educativas que promueven la igualdad y previenen la violencia desde las aulas. En esa misma línea, la Ciudad Autónoma de Melilla redobla su compromiso involucrando a toda la sociedad melillense con una programación variada, lúdica, educativa y reivindicativa.







