Melilla ha dado un paso importante en su compromiso con la accesibilidad y la inclusión. Desde esta semana, la playa de San Lorenzo cuenta con una nueva rampa diseñada específicamente para facilitar la entrada al mar a personas con movilidad reducida, un colectivo que hasta ahora debía enfrentarse a obstáculos físicos para disfrutar de este entorno natural.
El consejero de Medio Ambiente y Naturaleza, Daniel Ventura, ha sido el encargado de presentar esta infraestructura, destacando el esfuerzo realizado para que la obra viera finalmente la luz. “Seguimos trabajando por y para los melillenses y, por supuesto, para las personas que más lo necesitan. Esta era una tarea pendiente que quisimos empezar el año pasado, pero por cuestiones administrativas y de permisos no se pudo. Ahora, por fin, es una realidad”, ha afirmado.
Hasta la instalación de esta nueva rampa, existía un acceso más alejado que obligaba a recorrer largas distancias, lo que suponía una barrera considerable para muchas personas. “Una vez que pasabas la rampa anterior, aún quedaba un largo trecho para llegar a las pasarelas y después al agua. Ahora, con esta nueva infraestructura, todo ese camino se ha simplificado enormemente”, ha explicado Ventura.
La obra, catalogada como menor, se ha ejecutado en un plazo de entre dos y tres meses, con una inversión total de 41.000 euros. Además, el consejero ha adelantado que este es solo el primer paso de una serie de actuaciones orientadas a mejorar la experiencia de las personas con movilidad reducida en las playas melillenses. “Tenemos previsto instalar mobiliario específico para que estas personas puedan estar sentadas dentro del agua, con sombra incluida. Es un proyecto en el que venimos trabajando desde el año pasado y que esperamos poder poner en marcha lo antes posible”, señaló.
La apertura de esta rampa forma parte del Plan de Playas 2025, un ambicioso programa que contempla actuaciones en materia de accesibilidad, sostenibilidad, seguridad y calidad del entorno. Con esta y futuras intervenciones, la ciudad se posiciona como un referente nacional en la adecuación de sus espacios públicos para todos los ciudadanos, sin excepción.
“El objetivo de esta obra era precisamente ese: que personas mayores o con movilidad reducida puedan venir aquí y disfrutar de la playa con comodidad, dignidad y autonomía. Queremos que esta playa se convierta en un punto de encuentro ideal para ellos”, ha recalcado Ventura.
El consejero también ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para respetar estas instalaciones y a las normas de uso de las playas. “Este tipo de proyectos requieren de todos. Desde la administración ponemos los medios, pero también es importante el comportamiento cívico. Entre todos podemos tener una playa limpia, segura y accesible”.
Además, recordó que las actuaciones en la costa están sujetas a la autorización de la Dirección General de Costas, dependiente del Gobierno central. “Aunque tengamos un Plan de Playas municipal, todas las modificaciones requieren su visto bueno. No podemos actuar libremente, por eso también valoramos mucho cada avance que conseguimos”, ha subrayado.
Ventura ha cerrado su intervención reiterando el compromiso del Gobierno de Imbroda con el bienestar de todos los ciudadanos, especialmente los más vulnerables. “Seguimos trabajando para que Melilla sea una ciudad más justa, moderna y amable. Este tipo de actuaciones van dirigidas a mejorar la vida diaria de muchas personas que hasta ahora encontraban obstáculos para algo tan simple como disfrutar del mar. Esto también es justicia social”.