Tras la obligación de los melillenses de pagar más de cinco euros a Correos por cada envío o recepción de paquetes desde la península, se están viendo perjudicados tanto los usuarios como los trabajadores de la empresa.
Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT) interpusieron, en su momento, una denuncia ante la Inspección de Trabajo sobre la que todavía están esperando respuesta.
Tras la concentración realizada este viernes, el delegado de CCOO en la empresa, Juan Diego Román, ha opinado que es “totalmente injusto” que un particular quiera enviar, o recibir, paquetes de la península y se le duplique cualquiera de los impuestos que ya han sido pagados, como el IVA o el IPSI.
Así, Román cree que “Correos está aprovechándose de esta situación”.
Según ha explicado el responsable del sindicato en Correos, “en su afán no de recaudar para el Ayuntamiento, sino de buscar ellos su propio beneficio, están aplicando las tarifas que tienen publicas cuando existe la posibilidad de que, cuando se trata de productos de comercio electrónico, se pague directamente al comercio”.
Como en Melilla no existe esa posibilidad, porque no se aplica el IPSI, Román ha reiterado que “Correos se está aprovechando, en su afán de ir por lo económico, sin importarle, por un lado, el efecto que está creando en los ciudadanos de Melilla y, por otro, las consecuencias que pagan los trabajadores, que son el último eslabón y los que están sufriendo todos los improperios, insultos, quejas y reclamaciones por parte de los ciudadanos”.
En opinión del dirigente de CCOO, además, aquí Correos está empleando la táctica del “avestruz”, la de “meter la cabeza bajo tierra y no dar la cara en ningún sentido, ni ante los ciudadanos ni ante los trabajadores”.
En similares términos se ha expresado la delegada de la UGT en la empresa postal, Ana María Jiménez, quien ha señalado que le parece “mal, no; lo siguiente” y ha admitido que esta tasa está repercutiendo tanto en el usuario como en el trabajador de Correos.
Según ha manifestado, las entregas están siendo “mucho más complicadas”, debido a que los carteros no llevan cambio ni datáfono y no resulta fácil recoger dinero en efectivo en pleno siglo XXI. Así, según ha calculado, solamente se está efectuando alrededor de un tercio de las entregas que se hacían antes. “La pérdida de tiempo es brutal”, ha criticado.
Además, según Jiménez, existe el riesgo, para los trabajadores, de llevar tanto dinero encima, sobre todo si se tiene en cuenta que el cartero no tiene un seguro que le cubra una parte siquiera, por lo que, si sucede algún percance, lo tienen que pagar ellos de su bolsillo.
Menos plantilla
Por otro lado, esta lentitud en el reparto está provocando una reducción en la plantilla, según ha explicado Román, quien cree que esto lleva sucediendo desde que “Correos tomó el rumbo para primar lo económico antes que el servicio”.
Así, desde hace un año aproximadamente, hay alrededor de 12 personas menos contando repartos y oficinas. Según las cuentas de Román, si a principios de 2021 la plantilla era de 75 u 80 personas, ahora se llega con dificultad a los 60.
“Es un descenso brutal y lo peor de todo es que del proceso de consolidación de 7.700 plazas que se espera que salga en marzo de 2023, más del 80% son de cuatro horas, por lo cual estás condenando a los trabajadores a vivir al 50% y eso repercute en el servicio y en la calidad de vida de los trabajadores”, ha culminado Román.
Que no son 5 euros, que es como mínimo 5 euros, pudiendo llegar a los 20, han intentado que pague 22 euros en 2 ocasiones (mismo producto) 12 euros de tasa y 10 euros de ipsi, Más de tasa correos que de ipsi. vergonzoso correos.
Una estafa a los ciudadanos nos están robando