Enfocado en el propósito de Naciones Unidas y la Unión Europea de reducir a la mitad el número de fallecidos y heridos graves en siniestros viales, el Consejo Superior de Tráfico y Seguridad Vial dio el visto bueno a la Estrategia de Seguridad Vial 2030.
El pleno estuvo encabezado por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien calificó el proyecto como “ilusionante” y resaltó que “es fruto de un proceso que aúna la visión de organismos supranacionales y nacionales”.
Durante su intervención, Grande-Marlaska consideró que la estrategia se suma “a todas las políticas del Gobierno que de una u otra forma buscan un nuevo modelo de movilidad más moderno, eficiente, sostenible, saludable y seguro”.
Naciones Unidas incluyó en la Agenda 2030 la seguridad vial como uno de los problemas esenciales de salud pública a los que hacer frente mediante los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
En el caso de España, el país arrojó en 2019 una media de 37 fallecidos por millón de habitantes, 14 menos que el promedio de la Unión Europea. El objetivo de la nueva estrategia se centra en reducir al 50 por ciento las cifras de ese año, que dejó 1.755 víctimas mortales, 8.613 heridos graves y 130 mil heridos leves.
La reunión informó además sobre las actividades relevantes realizadas entre 2020 y 2021 en materia de seguridad vial, entre cuales destacaron la reducción de la velocidad a 30 kilómetros por hora en calles de un único carril de circulación en las ciudades, la reforma de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial (entra en vigor el próximo el 21 de marzo), la regulación de los vehículos de movilidad personal y su manual de características técnicas, la nueva señal de preseñalización de peligro V-16 o el nuevo título de Técnico Superior en Movilidad Segura y Sostenible de Formación Profesional.