La consejera de Cultura, Elena Fernández Treviño, ha informado de que será en unos días cuando se lleve a comisión que la retirada del monumento de Héroes de España se aborde en un pleno. Indicó que este asunto ya pasó por comisión para aprobar la retirada de este conjunto escultórico, pero añadió que ahora lo que se quiere es que se apruebe que se lleve a pleno para ser ahí donde se tome la decisión de su retirada.
Fernández Treviño comentó que se ha ido con un poco de retraso con este asunto pero por una cuestión de la Administración. Explicó que el secretario técnico del área pasó a ser director general y se ha tenido que esperar hasta contar con un secretario accidental para poder hacer estas tramitaciones.
De hecho, se espera que la siguiente Comisión de Cultura, en la que se abordará este tema, se pueda llevar a cabo, sino esta semana, la próxima.
La consejera de Cultura argumentó que se entiende desde el Gobierno local que este asunto debe ir al pleno y que sea en esta institución en donde se determine la retirada del monumento de Héroes de España. Explicó que el Consejo de Gobierno ya se manifestó y también hay un informe del secretario técnico sobre esta decisión de retirada pero no es vinculante. De ahí que insistió que se tiró de las actas de 1940 y se entiende que para mayor seguridad jurídica debe ser el pleno el que tome la decisión. “Se acordó en pleno su constitución y debe ser un pleno el que lo retire”.
Retirar no destruir
Además, Fernández Treviño explicó siempre ha hablado de “retirada” del conjunto escultórico y no de destrucción. Argumentó que la parte escultórica de Vicente Maeso se va a custodiar y se llevará a unos almacenes, a la espera de ver si se produce su musealización o no esta pieza porque tiene cierto valor artístico. Afirmó que esto se puede debatir.
“Y en cuanto a la parte de piedra, se podría llevar a almacenes y se conservará en parte o no”, indicó y dijo que ya se verá. “Lo que no será es resinificar ni se podrá más allá. El monumento no va a estar en el espacio público”, insistió.
Y al respecto, Vox Melilla informó de que cuenta ya con 1.000 firmas para intentar evitar la retirada de este conjunto escultórico. Fernández Treviño aseguró que este partido político, así como la Plataforma Millán Astray que defiende que no se haya retirado la estatua de Franco de la zona cercana al puerto, tiene todo el derecho a protestar y manifestar su desacuerdo con esta decisión porque estamos en democracia.
Afirmó que pueden pensar que no es correcto retirar este monumento y crear una mesa para recoger firmas de personas que opinen lo mismo. Sin embargo, Fernández Treviño argumentó que ese número es “insignificante” para una ciudad como Melilla y es una cantidad pequeña.
“Pero independientemente de eso estamos cumpliendo la ley. Lo que no pueden hacer algunos partidos de ultra derecha es ser muy pro ley en algunas cosas, y contra ley en otras. Algunas leyes les gustan y otras no y entonces, ¿hay que saltarse algunas y otras las cumplimos?”, añadió.
Fernández Treviño indicó que tiene claro que se cumple la Ley de Memoria Histórica con la retirada del monumento y se cuenta con las actas de 1940 en las que se describe por qué se hace el monumento y que se tiene que poner en el lugar donde estaba el café La Peña, donde fueron asesinados personas por ser de izquierdas, es decir, tener una ideología de izquierdas, con ideas republicanas o marxistas como decía en esas actas. “También alude directamente a la Ley de Memoria Histórica que no es una ley revanchista sino que pretende cerrar heridas de forma definitiva. Que no tengamos en nuestra ciudad ni en las calles ni en el espacio público elementos simbólicos que pertenecen a otra época. Se trata de democracia y ésta ha promulgado una serie de leyes y ésta es una de ellas”, añadió.
“Vox haciendo esto está animando a la ciudadanía no solamente a que exprese su desacuerdo, sino que firme contra la ley. Pero esta ley hay que cumplirla. Pueden estar en desacuerdo con que este monumento cumple o no la ley, pero la ley dice claro este tema y las actas describen por qué se construyó. No tenemos ninguna duda de que este símbolo debe no estar en la calle. Tienen derecho a discrepar y nosotros a seguir con el camino adelante para cumplir la ley”, concluyó.