La Plataforma de Contratación del Estado ha publicado ya la formalización del contrato para la ejecución de la construcción del colegio en los terrenos de Gabriel de Morales. Esta obra se ha asignado a una empresa multinacional que tiene más de 65 años de experiencia en el sector.
El precio de licitación con impuestos era de 11,5 millones de euros, pero se ha adjudicado por un importe (también con impuestos incluidos) de 10.128.138,52 euros, es decir, con una rebaja de 1.460.120,66 euros, que supone un 12,6% del total. Fue el pasado lunes 2 cuando se formalizó la contratación tras ser la mejor oferta para la Administración al haber obtenido la mayor puntuación, una vez que se han ponderado todos los criterios.
La Administración central recibió hasta cuatro ofertas diferentes para quedarse con este contrato, como son Asch Infraestructuras y Servicios; Constructora San José, que es la que lleva el IES en el Jardín Valenciano; Ferrovial Agroman; y Obrascón Huarte Lain.
Los pagos a la constructora
Los pagos que se van a realizar por parte del Estado son de 50.000 euros para este año, de 5.593.290 euros para el próximo, y de 4.484.847 en 2021. La construcción deberá estar lista en 24 meses, es decir, dos años tras la firma del acta de comprobación del replanteo, según se recoge en el contrato firmado.
La mesa de contratación indicaba hace un mes que por “unanimidad” y una vez clasificado y evaluado las ofertas se adjudicaba provisionalmente a la empresa Asch Infraestructuras y Servicios SA, que es una compañía global especialista en el desarrollo, conservación y mantenimiento de infraestructuras y pionera en gestión de concesiones. Cuenta con proyectos en Chile, entre otros países, según su web.
El centro educativo
Además de las aulas de Infantil y Primaria necesarias para los alumnos y los baños, habrá otros espacios docentes, como un taller de música, otro de informática, un espacio de uso polivalente o múltiples, una biblioteca, un aula de recursos y un gimnasio más vestuarios. Las instalaciones que se han diseñado para este colegio, recogen otras áreas, como los despachos del director, jefe de estudios o la secretaría con el archivo.
Habrá una sala de profesores y baños para ellos, también una consejería y reprografía y una sala para la asociación de madres y padres y para los alumnos.
Un comedor
A los cuartos de instalaciones y de limpieza, hay que sumar el vestuario para uso no docente y un almacén. Pero también va a contar este colegio con un comedor y cocina propios.
En cuanto a los espacios exteriores, según la memoria del proyecto que se puede encontrar en la web del Ministerio de Educación, se indica que habrá un aula exterior para Educación Infantil, así como una zona de juegos para estos alumnos y otra diferente para los de Primaria. Un porche cubierto, aparcamientos y zonas ajardinadas se suman a las pistas deportivas y a un huerto.
Los antecedentes
La parcela del antiguo cuartel de Gabriel de Morales, el de Santiago y el de Primo de Rivera forman parte de un mismo acuerdo entre el Ministerio de Defensa y la Ciudad para la adquisición de estos terrenos por parte de la Administración local con el objetivo de construir en los tres diferentes centros de educación y viviendas de protección oficial.
En cuanto al espacio en el que se ubicará el colegio, fue antes del verano de 2018 cuando se iniciaron las obras de demolición de los edificios que había en el interior.
Inicio de las obras
En septiembre de ese año, la Ciudad aprobaba el proyecto de urbanización de Gabriel de Morales. Apuntaba que para el primer semestre del 2019, se podrían iniciar las obras del nuevo colegio porque solo había que sacar a licitación el proyecto, pero la realidad es que aún faltan unas semanas para el inicio de las obras porque no comenzarán hasta que no se firme el acta de replanteo.