El pasado fin de semana, los jóvenes judocas melillenses protagonizaron una participación valiente y llena de esfuerzo en el Campeonato de España Infantil y Cadete de judo. A pesar de las dificultades en el arbitraje y de las exigencias del torneo, los deportistas de la Federación Melillense de Judo y Deportes Asociados (FMJDA) demostraron carácter, compromiso y progreso en cada uno de sus combates.
La competición, celebrada entre el sábado 26 y el domingo 27 de abril, dejó actuaciones destacadas en ambas categorías, aunque también dejó un sabor agridulce por decisiones arbitrales polémicas que afectaron las aspiraciones de varios representantes de la ciudad autónoma.
Sábado intenso
La jornada del sábado arrancó temprano y se dividió en tres bloques: mañana, mediodía y tarde. Durante la mañana y mediodía, las principales promesas cadetes de Melilla lucharon con garra, pero el desarrollo de los combates estuvo marcado por decisiones arbitrales desfavorables. Pese al buen nivel técnico mostrado, ninguno de los cuatro principales cadetes pudo avanzar debido a interpretaciones arbitrales que, una vez más, no favorecieron a los deportistas de la ciudad autónoma.
Además, las normas de repesca no permitieron a los afectados volver a entrar en competición, truncando así sus opciones de medalla. Ya en la jornada de tarde, en la categoría infantil, llegó una de las grandes revelaciones del campeonato: Muhammad Mimoun Al-lal, en la categoría de -66 kg, fue superando ronda tras ronda con solvencia hasta caer en su tercer combate. Aunque no pudo ser repescado, su gran actuación le valió un meritorio séptimo puesto nacional, todo un logro en un campeonato de altísimo nivel.
Domingo de emociones
La jornada dominical se adelantó media hora, comenzando antes de lo previsto para poder finalizar el campeonato a las 15:00 horas. Esta jornada estuvo dedicada exclusivamente a la categoría infantil. Bruno Prieto Moya, en -42 kg, fue el primero en competir. Dominando su combate desde el inicio, un error arbitral le arrebató una victoria que ya tenía prácticamente asegurada. Sin posibilidad de repesca, su participación terminó de manera injusta, pero con la cabeza alta.
A continuación, fue el turno de Enrique Sierra, en -60 kg. Enrique llevaba la ventaja en su combate hasta que una prolongada interrupción para resolver una duda arbitral afectó su concentración. Tras reanudarse el combate, no pudo retomar el ritmo y acabó cediendo, también sin opciones de repesca. Finalmente, la gran promesa del judo femenino melillense, Aitana Muñoz Moreno en -52 kg, dejó muestras de su talento superando sus dos primeras rondas. En su tercer combate, sin embargo, una controvertida decisión arbitral le negó una victoria merecida.
A pesar de esta injusticia, Aitana concluyó su participación en un excelente noveno puesto nacional, destacándose como una de las mejores jóvenes judocas de su categoría. Desde la Federación Melillense de Judo se quiso ensalzar el enorme esfuerzo realizado tanto por los deportistas como por los técnicos, que no solo asumieron el trabajo diario sino también un importante sobreesfuerzo económico para que la expedición pudiese acudir a la cita nacional. Especial mención recibió el patrocinio de la firma Vitaldent, y en particular de su gerente en Melilla, Manuel Rojas Domínguez, cuyo apoyo desinteresado fue fundamental para hacer posible esta participación.
Además, no faltaron palabras de agradecimiento hacia las familias de los deportistas, que brindaron su apoyo moral y afectivo antes, durante y después del campeonato, fortaleciendo el espíritu de equipo.Con una enorme dosis de adrenalina y motivación, los jóvenes judocas ya se preparan para su próximo reto: la Supercopa de España Cadete Ciudad de Don Benito (Extremadura), que se celebrará el próximo 17 de mayo. Conscientes de que cada experiencia suma y fortalece, los melillenses regresan a los entrenamientos con ilusión renovada.