Tomás Galindo es el delegado del MSC Torreblanca FS. Después de muchos años dedicados al mundo del deporte, es todo un profesional haciendo que no le falte de nada ni a la plantilla ni al cuerpo técnico. Tomás es la primera cara que ven las jugadoras cuando llegan por la mañana a entrenar y les toma la temperatura para acceder al pabellón. Es el primero en llegar y el último en irse y no se le escapa ningún detalle con tal de facilitar el trabajo a las Guerreras. Un trabajo que también realiza en los partidos de casa para hacer sentir al equipo visitante como si estuviera en su propio campo.
Trabajo diario
Tomás Galindo es el primero en llegar al pabellón ‘Javier Imbroda Ortiz’, junto con Marcio Santos o Luny para preparar la sesión de entrenamiento. Se preocupa de que todas las instalaciones, mesa incluida, estén desinfectadas y prepara los balones, petos, el agua de manera independiente y demás objetos para que no se pierda ningún segundo de la sesión en algo que no sea trabajar. Si es necesario, Tomás se pone a recoger balones detrás de la portería.
Cada semana, se encarga de ordenar e ir llamando a las jugadoras que van a realizar los tests de antígenos cada semana, además de pedir la firma de las jugadoras para el consentimiento informado para los viajes del equipo.
Viajes
Además de delegado, también ejerce, junto con Rafa, como encargado de expedición en los viajes de las Guerreras. Es el encargado de sacar las tarjetas de embarque, de solicitar y repartir las llaves del hotel, de hablar con el chófer de los autocares o de comunicarse en las diferentes cadenas hoteleras para cerrar los menús de comida.
Facilitar el trabajo previsto por el cuerpo técnico buscando salas de vídeo y acondicionándolas para que no falte de nada.
Preparativos antes de un partido
El día de partido, prácticamente abre el pabellón. Lleva las herramientas para prevenir el Covid-19 y una vez comprobada la temperatura y desinfectado sus manos se pone manos a la obra. Coloca los balones del calentamiento en las porterías y le deja dos al dúo arbitral para que puedan medir la presión. Saca los diferentes petos de calentamiento y coloca agua fría en los vestuarios desinfectados de los árbitros y el equipo contrario.
Recibe a ambas plantillas y presenta la indumentaria de juego y las fichas ante los colegiados para que no haya ninguna confusión durante el partido.
Reparte las convocatorias de ambos equipos a la prensa y se prepara para ayudar en las ruedas de calentamiento.
Durante el partido
Durante el partido tiene que ejercer de delegado. Entregar las cartulinas para los tiempos muertos, arreglar cualquier problema que pueda surgir (agujeros en las redes, sacar del campo a una jugadora expulsada o incluso limpiar con la mopa el sudor del parqué). Y todo ello poniendo el alma y el máximo cariño hacia las jugadoras y el cuerpo técnico.
Un trabajo en la sombra, el que lleva a cabo Tomás Galindo, muy necesario para el buen trabajo de las Guerreras en su día a día y que les ayuda a crecer en la competición liguera.