Coalición por Melilla (CpM) ha solicitado la convocatoria urgente de una Junta de Portavoces para elevar al Pleno de la Asamblea una declaración institucional en condena a la actuación del Estado de Israel en la Franja de Gaza. La diputada Dunia Almansouri ha defendido esta propuesta durante una comparecencia pública este viernes, en la que ha acusado al Partido Popular de “blanquear” los ataques contra la población palestina y de fomentar el “silencio cómplice” desde las instituciones.
En un discurso marcado por un tono crítico y vehemente, Almansouri ha denunciado que la comunidad internacional y gran parte de la clase política española están dando la espalda a lo que considera “una de las mayores tragedias humanitarias del siglo XXI”. “No podemos mirar para otro lado mientras se violan los derechos humanos de miles de personas”, afirmó.
Durante su intervención, la diputada cargó contra dirigentes del PP que, a su juicio, han minimizado o justificado la violencia ejercida por Israel. Entre ellos, mencionó al exministro José Manuel García-Margallo, melillense de nacimiento, a quien acusó de negar la existencia de un genocidio basándose en una lectura interesada del Convenio de Ginebra. “Lo que está ocurriendo en Palestina no es un conflicto, es una matanza, una matanza en mayúsculas”, sentenció Almansouri, subrayando que la población civil “está siendo asesinada de hambre, sin posibilidad de defensa ni asistencia”.
CpM ha formulado tres exigencias concretas en su propuesta de declaración institucional: en primer lugar, que el Grupo Popular en el Congreso cambie su postura y apoye el embargo de armas a Israel; en segundo, que el Gobierno de España rompa relaciones diplomáticas con el “Estado genocida”; y en tercero, que Melilla destine una partida económica de ayuda humanitaria para la población de Gaza. “Lo hicimos con Ucrania y con otros desastres naturales. No hay excusas para no hacerlo ahora”, recordó.
Almansouri también puso sobre la mesa que los presupuestos actuales contemplan una partida de 15.000 euros para ayuda internacional, pero considera esa cantidad “ínfima” frente a la gravedad de la crisis. Propuso elevar la dotación a cifras que oscilen entre 300.000 y 500.000 euros, dependiendo de la voluntad del Ejecutivo local.
La parlamentaria melillense reprochó al PP su falta de sensibilidad con la causa palestina. “Nos piden que callemos, pero el silencio en estos casos es complicidad. La política no puede estar al margen de la humanidad”, afirmó, apelando al compromiso solidario que, según recordó, Melilla ya ha demostrado en otras situaciones internacionales.
El presidente de los populares melillenses, Juan José Imbroda, afeó el pasado jueves a quienes utilizan la tragedia de Gaza con fines partidistas. En declaraciones formuladas en rueda de prensa, Imbroda calificó de “sacrílego” que se pretenda “hacer política con un conflicto tan doloroso, que nada tiene que ver con la realidad de Melilla”.
Imbroda defendió que la ciudad autónoma no puede convertirse en una extensión del debate geopolítico internacional, y recalcó que este tipo de iniciativas “no ayudan a la convivencia” ni reflejan la pluralidad de sentimientos que existen entre los melillenses. “Nosotros también deseamos la paz, como lo desea el Papa o cualquier persona con conciencia, pero no compartimos que se use esta tragedia como munición política”, aseguró.
Almansouri respondió a estas críticas recordando que en anteriores conflictos, como el de Ucrania, hubo unidad institucional y gestos concretos de apoyo desde Melilla, tanto desde el Gobierno como desde la sociedad civil. “¿Por qué ahora tenemos que callar? ¿Por qué no podemos hablar de la masacre en Palestina?”, cuestionó. Según la diputada, no se trata de importar conflictos, sino de actuar en coherencia con los valores humanitarios que siempre ha defendido la ciudad.
La propuesta de CpM plantea así un nuevo punto de fricción en la Asamblea melillense, en un contexto político ya polarizado por las diferencias en materia de política internacional. Está por ver si el Partido Popular accede a debatir la propuesta o si, como ha anticipado Imbroda, opta por desmarcarse por completo de esta iniciativa.