UGT y CCOO dicen que Rajoy no ha tomado la decisión y que ha sido “impuesta” por la UE. Tras conocer la decisión del Eurogrupo, a petición del Gobierno central, de conceder un préstamo al Estado español para el rescate del sistema financiero, UGT y CCOO se ratificaron en la exigencia del movimiento sindical de que la primera reforma que necesitaba este país no era la laboral sino la del sistema financiero. En este sentido, lamentaron que esta decisión no haya sido tomada por el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, y se deba, en cambio, a una “imposición de las autoridades europeas”.
Ambos sindicatos consideraron, por otro lado, que el rescate del sistema financiero español demuestra “la incapacidad de nuestros gobernantes de impulsar una verdadera reforma de las entidades financieras españolas y la ausencia de una estrategia concertada y ambiciosa para afrontar la salida de la crisis económica por la que atraviesa España”. Además, aseguraron que “esta salida no será posible si paralelamente el Gobierno español no activa una reforma fiscal orientada a dotar al Estado de los recursos necesarios para desarrollar las políticas públicas, la reactivación económica y de cohesión social”.
Por otra parte, UGT y CCOO denunciaron la “pésima pedagogía política ante la ciudadanía que supone disponer de ingentes recursos económicos para hacer frente al saneamiento y rescate del sistema financiero español y la nula voluntad de la Unión Europea y del Gobierno de Mariano Rajoy de buscar y pelear por financiación y recursos para garantizar el Estado de bienestar y la atención de las personas que peor lo están pasando”.
Ambos sindicatos dijeron creer que es más “oportuno preguntarse si el préstamo derivado del rescate pasa a engordar la deuda del Estado español, cómo va a poder devolverlo y de dónde va a sacar la liquidez necesaria”. Por ello, es “imprescindible la máxima transparencia y toda la información a la sociedad española del proceso a seguir y de sus posibles consecuencias sociales”, razonaron en una nota de prensa.
Al mismo tiempo consideraron que deben exigirse responsabilidades a aquéllos que “nos han llevado a esta situación y que están eludiendo sistemáticamente dar explicaciones a la sociedad española” y alertaron del impacto que tendrán las medidas de saneamiento de las entidades financieras sobre el empleo del sector. “Pelearemos decididamente para que la mala gestión de algunos directivos de bancos y cajas y la incapacidad de las autoridades políticas, no acaben pagándola, una vez más, los trabajadores y trabajadoras de estas entidades”, concluyeron ambos sindicatos.
Por último, UGT y CCOO lamentaron nuevamente que, dada la trascendencia de las medidas adoptadas, el Gobierno central no haya convocado a los agentes sociales y que no haya sido el propio presidente Mariano Rajoy quien haya dado explicaciones a la ciudadanía española.