La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) considera que era "previsible" el intento de entrada masiva en Melilla por parte de menores marroquíes a través de la frontera de Beni-Enzar. La avalancha se produjo en los primeros momentos de la madrugada de este miércoles y fue controlada por las fuerzas policiales de Marruecos, que cerraron el portón de acceso a la ciudad de manera intermitente.
Esta organización recordó que Melilla está soportando una importante presión migratoria vía marítima en la zona del Dique Sur. Según sus responsables, diariamente hay intentos de entrada a nado a Melilla por parte de jóvenes marroquíes que, según creen, son los mismos que tratan también de entrar a través de la frontera.
"Son los mismos que se tiran al mar desde el puerto de Beni-Enzar. También están prácticamente a la entrada de la frontera de Melilla por la parte marroquí. Se trata de grupos de menores que están ahí todo el día pululando, intentando meterse entre los coches para pasar a la ciudad, como puede apreciarse cuando se pasa por allí", explican desde la AEGC.
Muchos de esos chicos son los que se meten por la zona de las rocas del puerto de Beni-Enzar para tratar de entrar a nado en Melilla. "Normalmente durante todo el día hacemos un rechazo constante", asegura esta asociación profesional.
La AEGC entiende que la Guardia Civil está preparada para soportar esas avalanchas, si bien especifica que es la Policía Nacional la que está en primer línea según se entra a Melilla por la frontera. "Ellos son los que tienen que soportar el primer envite".
Estos guardias civiles entienden que los funcionarios de la Policía Nacional también están preparados porque el sistema de control es cerrar rápidamente los portones. "Si se cierran de forma eficiente, ya sería muy difícil que pudieran pasar a Melilla".
Y eso fue lo que hicieron, de hecho, los policías marroquíes, cerrar los portones de inmediato. "Las autoridades de Marruecos estuvieron rápidas y con el cierre de esos portones es muy difícil que esos chicos lleguen a la zona de la frontera con Melilla".
Lo que tiene claro la AEGC es que los intentos de acceso a Melilla no van a cesar. "La presión migratoria no va a cesar, lo único es que las autoridades marroquíes y las españolas colaboren como están colaborando actualmente y que haya una serie de mejoras en lo que es la inmigración, pero que la presión va a seguir en un futuro", concluye.