El Aeropuerto de Melilla continúa en la misma senda de crecimiento con la que acabó 2022, el año de mayor tráfico en la historia de la infraestructura de la Ciudad Autónoma. El pasado mes de septiembre, 42.788 pasajeros se desplazaron en 927 vuelos.
Estas cifras se traducen en incrementos porcentuales en comparación a los niveles de tráfico mismo mes del año pasado del 1,7% más de viajeros y del 2,1% más de operaciones que en septiembre de 2022.
El grueso de los pasajeros registrados el pasado mes viajó en conexiones comerciales, hasta sumar 42.617, lo que supone un 1,8% más que en las mismas fechas de 2022. De ellos, casi la mitad (19.982) se trasladó en vuelos con origen o destino al Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol, la conexión más demandada, seguida de los enlaces con el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, que usaron más de 11.427 pasajeros.
Respecto al resto de rutas con aeropuertos españoles, más de 4.000 usuarios conectaron con el Aeropuerto de Almería, 4.136 viajaron a Granada, más de 2.140 se desplazaron a Sevilla y los enlaces con el Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat reunieron más de 800 viajeros.
La tendencia del tráfico en septiembre y en lo que va de año favorece el balance de los primeros nueve meses de 2023, un periodo en el que el Aeropuerto de Melilla registró 376.130 pasajeros y 8.086 operaciones.
Entre enero y septiembre, el crecimiento de viajeros y de movimientos supera los 10 puntos porcentuales en la infraestructura melillense, que ha gestionado un 15,4% más de pasajeros y un 14,6% más de aterrizajes y despegues que en el mismo periodo de 2022.
No obstante, el mejor dato sobre número de pasajeros se produjo el pasado mes de agosto cuando el aeropuerto de Melilla cerró con 46.515 pasajeros, lo que supone un crecimiento del 7,7% respecto a la misma fecha de 2022. Con este registro, el tráfico del aeropuerto revalida, un mes más, la positiva senda iniciada el año pasado, cuando cerró el ejercicio con más actividad de su historia.