Compromís ha preguntado al Gobierno por las gestiones que ha hecho desde el asesinato de Emin y Pisly, los dos jóvenes melillenses que fueron tiroteados en aguas cercanas a Melilla en 2013 por miembros de la Marina Real Marroquí. Como respuesta, desde el Ejecutivo central le contestan al senador Carles Mulet que el caso "es motivo de preocupación y de interés por parte del Ministerio de Exteriores".
La respuesta también añade que "se han hecho gestiones a distintos niveles" de este asunto, sin aclarar cuáles, cuándo y con quién.
La respuesta ha sido motivo de indignación en Compromís y el senador Mulet la ha calificado de insulto grave hacia los familiares de los jóvenes asesinados. Por eso ha pedido la comparecencia del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, para abordar el tema.
Además ha registrado más preguntas por escrito al Gobierno para saber qué gestiones ha hecho el Ejecutivo, en qué fecha, a qué niveles y con qué resultados.
También ha querido saber ¿en qué se traslada la supuesta preocupación e interés del Ministerio en torno al caso de Emin y Pisly y de paso Compromís les afea que no se les haya atendido nunca ni se haya prestado atención a su petición de justicia.
Por último, desde Compromís preguntan qué medidas piensa adoptar el Gobierno para garantizar el derecho de las familias de Emin y Pilsy a la verdad y la justicia para que puedan, de una vez, pasar página.
Y cierra la tanda de preguntas al Gobierno con un durísimo: "¿Por qué tienen tan poca vergüenza?"
El caso de Emin y Pisly
El día 27 de octubre de 2013 D. Abdeslam Ahmed ALÍ, de 24 años de edad; y D. Amin Mohamed Dris, de 20 años de edad, ambos ciudadanos españoles residentes en Melilla, fueron asesinados por disparos efectuados por miembros de la Marina Real Marroquí cuya identidad conocemos. El suceso tuvo lugar cuando estos se encontraban a bordo de una embarcación de recreo con matrícula y bandera españolas, en las inmediaciones de Punta Negrí (en el Mar Mediterráneo).
Después de identificar a estos jóvenes y recuperar sus cadáveres, que habían sido sometidos a una autopsia en el Reino de Marruecos, por parte de las autoridades españolas y en el marco del procedimiento judicial incoado en su día se practicó otra autopsia en Melilla, en la que consta que no se conoce el tipo de munición que causó la muerte así como que los cadáveres habían sido lavados, amortajados y conservados en frigorífico, por lo que el resultado de las actuaciones quedó gravemente afectado por la primera intervención.
Los familiares tienen fundadas sospechas de que sus hijos fueron maltratados con una brutal paliza y posteriormente asesinados a bocajarro, así como que sus cuerpos no fueron desaparecidos gracias a la intervención de la Gendarmería marroquí a causa de un aviso efectuado por un amigo de sus hijos, quien fue informado por estos, la misma tarde de los hechos, de que se sentían amenazados por una patrullera de la Marina Real Marroquí que los estaba acometiendo.
Finalmente la intervención de la Gendarmería obligó a los miembros de la Marina Real Marroquí a que retornase los cadáveres de los jóvenes al puerto de Beni Ensar.
A raíz de los hechos, tanto el Gobierno de la ciudad (Gobierno conformado por miembros del Partido Popular en Melilla) como el resto de partidos políticos representados en la Ciudad Autónoma de Melilla, les manifestaron su apoyo e hicieron ofrecimientos de ayuda para que los ministerios españoles afectados por razón de su competencia les asistieran en el esclarecimiento de los hechos.
A instancias del delegado del Gobierno, D. Abdelmalik el-Barkani, los familiares se reunieron en Madrid el día 18 de diciembre del 2013 con D. Cristóbal Ramón Valdés, ya por entonces director General de Asistencia a españoles en el exterior; y con D. Bosco Giménez Soriano, entonces subdirector General de Protección y Asistencia Consular, quienes les indicaron que "todo el asunto estaba bajo secreto del sumario y que estaba en un Juzgado militar en Rabat" y les prometió que los tendrían informados del desarrollo de los acontecimientos.
La interlocución de los familiares con miembros del Gobierno, a pesar de las dificultades, se ha producido en contadas ocasiones. De hecho, a pesar de sendas visitas a la ciudad de Melilla de algunos ministros, después de una gran insistencia por parte de los familiares, los padres de Emin y Pisly siempre han recibido la respuesta de que estaban al tanto de todo y que les responderían sobre las gestiones que se estaban realizando. No obstante, después de años desde que se produjeron los dramáticos hechos, continúan sin respuesta alguna.
Cada día 27 de cada mes se concentran en las puertas de la Asamblea de la Ciudad Autónoma de Melilla, con el apoyo de todos los partidos políticos representados en la Asamblea a excepción de una parte de los diputados del Partido Popular (12 de los 25 diputados).