Uno de los cuatro expedientes instruidos por la Policía Local en Melilla por delitos contra la seguridad vial durante el último fin de semana correspondió al conductor de un vehículo que estaba bajo la influencia de bebidas alcohólicas y se vio implicado en un accidente de tráfico que causó además daños materiales.
Otros dos delitos fueron como consecuencia de sendas intervenciones policiales con motivo del tráfico, por infracciones administrativas, con las que se pudo comprobar que uno de los conductores carecía de permiso de conducción y que el otro conducía bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
Asimismo, la última de las instrucciones fue con motivo de un control de documentación, a través del cual se pudo observar que la conductora del vehículo estaba bajo los efectos del alcohol.
Según ha trascendido en una nota de prensa, en la totalidad de las actuaciones los implicados quedaron en libertad y, por tanto, en calidad de investigados no detenidos.
Tres detenciones en un día
También durante el pasado fin de semana, en concreto el sábado, los agentes locales llevaron a cabo tres detenciones. Las dos primeras fueron producto de una alteración del orden público en el interior del Puerto Noray, que incluyó desobediencia, resistencia y amenazas a los agentes de la autoridad.
Mientras, la tercera de ellas fue provocada por un hecho de violencia de género en la calle Zamora, donde una mujer había sido agredida por su marido, quien huyó después de sustraerle dinero.
En este caso, tras haber sido facilitada una descripción del sospechoso, se procedió a su búsqueda y fue finalmente localizado en la calle Jiménez Iglesias. Durante el cacheo del agresor, se le intervino el dinero robado.
Luego, el detenido fue trasladado a las dependencias policiales, donde quedó ingresado en calabozos a la espera de su puesta a disposición judicial.
Tres, me parece un número demasiado irrisorio para lo que se ve en los fines de semana, de dos y media a seis de la mañana, en la calle general Polavieja, cuando decenas de vehículos paran a repostar en el 24h de enfrente del cine Perelló. Esto es un dato más, pues imagino que en todos los surtidores de los 24h, sucederá lo mismo. Y eso que en esa franja horaria se prohíbe la venta de alcohol. Pero muchos vecinos imaginamos que estos controles policiales no se producen porque a esas horas de la madrugada , no es propio estar en la calle.