El sindicato Acaip-UGT tiene la certeza que las agresiones en el centro penitenciario de Melilla “van a ir a más”. Fuentes del sindicato, representante de los funcionarios del centro, recalcan que “es una situación muy complicada” la que están viviendo .
Actualmente hay cuatro trabajadores de baja por agresiones de presos y subrayan que la plantilla se siente abandonada por la dirección del centro, sobre la que aseguran que “protege a los agresores y estudia detenidamente la actuación de los funcionarios”.
“El ejemplo más claro lo tenemos con los hechos acaecidos en las últimas semanas, donde un preso con problemas mentales que ha agredido y ha amenazado a funcionarios, destrozado celdas, televisores, se ha peleado con otros internos y está haciendo vida normal en el módulo”. Critican que, el director, en vez de enviarlo a un hospital psiquiátrico penitenciario donde reciba la atención debida, lo único que dice que es que aguantemos porque le queda muy poco para quedar en libertad, por lo que el problema lo tendrá la sociedad civil en unos días”.
Es por esta situación que hacen un llamamiento a la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, para que se interese por la situación de la cárcel de la Ciudad Autónoma, “que es también su responsabilidad”, apuntan.
Por otro lado, han recalcado que Acaip es una organización seria y que nunca han querido ser alarmistas, “pero a nadie le pagan para que le agredan, le escupan o le amenacen”. Piensan que si no se toman medidas al respecto, “va a haber una desgracia más pronto que tarde.”
Agresión
Un interno con problemas psiquiátricos, residente de la prisión de Melilla, propinó un puñetazo al jefe de Servicios de la prisión dejándole inconsciente y fue necesario trasladarle a urgencias donde fue atendida su grave lesión ocular. Los hechos se produjeron este martes cuando se procedía a reducir al reo para evitar que se autolesionara, según ha informado el sindicato ACAIP-UGT en una nota de prensa