Las familias de Emin y Pisly vuelven a convocar a la ciudadanía melillense para sumarse a la concentración que cada mes tiene lugar para exigir justicia tras la muerte de los dos jóvenes melillenses a mano de las autoridades marroquíes. La cita es a las 12:00 horas el próximo viernes 27 frente a la Asamblea y se guaradarán cinco minutos de silencio. Esta vez se cumplen 7 años y 10 meses desde la pérdida de los dos jóvenes.
“Se cumplen 7años y 10 meses de los asesinatos de los melillenses Emin, de 20 años, y Pisly, de 24 años, a manos de la Marina marroquí (a tiros a bocajarro después de torturarlos y apalearlos según según la autopsia hecha en España) mientras estaban en una embarcación de recreo en aguas cercanas a Melilla” señaló la familia en un comunicado.
Criticaron que hasta la fecha no haya respuestas oficiales ni por parte de España ni por parte de Marruecos. “Seguimos exigiendo hoy al nuevo ministro de Asuntos Exteriores el señor Albares que nos dérespuestas sobre el caso y se haga justicia y que España presione al Gobierno marroquí que de respuestas y explicaciones que hasta la fecha solo silencio por respuesta. A pesar de estar identificados los autores del brutal asesinato”, apuntaron.
También siguen pidiendo el apoyo de los melillenses y al Gobierno de la Ciudad Autónoma de Melilla. “Que nos apoyen como lo han estando haciendo desde que estaban en la oposición”, expresaron.
Justicia
A finales del 2020, sufrieron un gran varapalo después de que la Audiencia Nacional archivara la investigación sobre la muerte de dos jóvenes melillenses ametrallados supuestamente en 2013 por una patrullera de la Marina Real marroquí. Abdeselam Ahmed, Pisly, y Amin Mohamed, Emin, fallecieron tras los disparos efectuados supuestamente desde una embarcación de la Marina Real marroquí cuando pescaban en una lancha en aguas de Punta Negri (Marruecos), el 27 de octubre del 2013.
La Audiencia Nacional llevaba años investigando esta causa, y el pasado mes de septiembre el magistrado José Luis Calama ordenó la busca y captura e ingreso en prisión de tres militares marroquíes como presuntos autores del tiroteo. Una decisión que fue recurrida por la Fiscalía ante la Sala de lo Penal de la Audiencia, que ahora le da la razón al revocar el auto del juez y ordena además el archivo provisional de la causa.
Una decisión “que carece de todo sentido” y que supone “un varapalo para las familias” porque les deja “desamparados” tras “el asesinato de sus propios hijos por unos presuntos responsables que figuran en la causa como investigados desde 2014”, asegura Pedro Díaz, abogado del despacho ILOCAD, que actúa en su defensa. Las concentraciones han tenido lugar durante todos los meses, con un breve parón durante la pandemia.