El presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, y el consejero de Infraestructuras, Rachid Bussian, visitaron ayer el centro de reforma de Melilla. El objetivo era ver un terreno diáfano y sin utilizar que hay en estas instalaciones y que se podría usar para construir un edificio. No obstante, ese inmueble sería para el uso de los menores extranjeros no acompañados que hay en régimen de acogida en La Purísima. El objetivo del Gobierno local es “descongestionar” este último centro que ayer contaba con 812 menores.
De Castro aseveró que en La Purísima es más complicado hacer obras porque hay muchos desniveles y se tiene que contar con la aprobación de Patrimonio para hacer cambios al ser un antiguo acuartelamiento. En cambio, el terreno en el que se encuentra el centro de reforma es perfecto para hacer una nueva construcción.
Ahora indicó que los técnicos van a medir bien el terreno y diseñarán cómo es ese nuevo inmueble y los servicios que precisa, desde un comedor a una sala de estar, baños y habitaciones.
El presidente de la Ciudad destacó que será un edificio independiente del centro de reforma con entrada y salida propia. Además, remarcó que se tienen que salvaguardar los derechos de todos los menores, tanto de los que están en reforma como de los acogidos por la Ciudad. Subrayó que su idea es que haya plazas para más de 50 menores, “será un número importante”, porque insistió en que el objetivo es disminuir el número de chicos que hay en La Purísima.
Aunque De Castro apuntó que serán los técnicos los que tomarán la decisión de ver qué chicos se van a ese nuevo edificio cuando esté construido, el consejero de Infraestructura indicó que pueden ser los de primera acogida porque es el grupo más numeroso.
Bussian aseveró que es el módulo de primera acogida de La Purísima el que está más masificado y el que precisa de más espacios para los menores.
La idea de Infraestructuras, aunque dependerá del proyecto que elaboren los técnicos, es dar servicio en ese edificio a unos 80 niños y jóvenes tutelados.
Bussian remarcó que el centro de reforma tiene muchas instalaciones, como el agua o la cocina, que se podrían conectar directamente a este nuevo inmueble por lo que se ahorra tanto dinero como tiempo en su construcción.
También apuntó el consejero que esta obra saldría por un proceso de urgencia o emergencia porque se tienen que dar toda la prisa posible para aumentar la capacidad de acogida de La Purísima.
Otras obras en La Purísima
Por otro lado y aunque se trata de un proyecto de Medio Ambiente, Bussian confirmó que ya está listo el proyecto para hacer la recogida de aguas fecales que hay en los alrededores del centro de acogida. Indicó que son unos 400.000 euros de presupuesto y que se anunciará cómo será esta intervención cuando Defensa dé el permiso para actuar al área de Hassan Mohatar.
Al margen de esto, esta semana se han aprobado otras obras de mejora en La Purísima. De hecho, se van a reformar los muros. Se trata de un proyecto del Gobierno anterior que había propuesto elevar estas paredes para evitar que los menores puedan escaparse del centro por ahí o que alguien pueda entrar en dichas instalaciones. Además, tras una denuncia de la Fiscalía, se van a rehabilitar unos baños y duchas. Todo esto se ha tramitado con carácter urgente.
Bussian aseguró que cualquier intervención que sea necesaria para mejorar el centro se hará por parte del Gobierno local.
No obstante, el presidente de la Ciudad y el consejero aprovecharon la visita al centro de reforma para conocer cómo son las instalaciones. Además de estar en los patios, estuvieron en un módulo para ver las habitaciones, entraron en las aulas de formación y también en la zona de la cocina.