El paso fronterizo de Barrio Chino está sin mercancías desde este miércoles y no se prevén descargas hasta el 22 de abril. La Confederación de Empresarios de Melilla (CEME) indicó a El Faro que se había interesado por este asunto porque algunos comerciantes les habían llamado para ver qué pasaba en este puesto fronterizo. Fuentes consultadas por El Faro dijeron que fue una decisión de la Guardia Civil y de la Delegación del Gobierno que cesara el comercio atípico con el objetivo de evitar que haya problemas de orden público en la frontera ante la falta de bultos.
Son miles de personas, más de 3.000, las que pasan a diario a la ciudad para transportar mercancía hasta Marruecos y la falta de estos productos puede provocar discusiones con el objetivo de realizar esos pocos portes que hay estos días.
De hecho, la CEME informó de que tanto el lunes como el martes la Guardia Civil dio varias vueltas a los listados de vehículos de descarga porque no había los habituales para dejar allí la mercancía.
La explicación de por qué hay menos mercancía en Barrio Chino está en que los comerciantes ahora compran nuevos productos para abastecer los almacenes. Así lo destacó la confederación que indicó que entre abril y mayo se hacen las nuevas compras de mercancías, por ejemplo, en el caso de la ropa de cama, nuevas sábanas de temporada de primavera y verano. Esta campaña de compras que inician muchos comerciantes fuera de la ciudad, se nota en Melilla con una especie de parón en la salida de mercancías. Esta situación se volverá a repetir de nuevo en otoño, añadió la CEME.
La asociación de empresarios reconoce que ha bajado un poco el número de mercancías que salen de la ciudad. No obstante, aseveró que este parón en Barrio Chino se debe a que los comerciantes que llevan sus mercancías con porteadores a Marruecos están ahora inmersos en la compra de nuevos materiales para su venta.
Fuentes de la Delegación del Gobierno matizaron que no se ha producido un cierre de la frontera. Destacaron que en realidad está abierta para el paso de cualquier ciudadano, aunque, al no haber mercancía que transportar a Marruecos, los porteadores no vienen a Melilla.
Estas mismas fuentes indicaron que será en Semana Santa cuando se cierre la frontera de Barrio Chino para poder destinar los efectivos que están allí atendiendo el paso de personas a otras áreas de la ciudad por las procesiones.