Un individuo fue condenado ayer a un año de prisión y a una multa de 2.500 euros como autor de un delito contra la salud pública. Así lo dictó el titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Melilla después de que el hombre reconociera su culpabilidad en la sala. De acuerdo con la acusación de la Fiscalía, la Policía cazó al encausado llevando ocultos 140 gramos de cannabis sativa.
Estos hechos tuvieron lugar el 25 de enero de 2014 en el paso fronterizo de Barrio Chino. Fue entonces cuando agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) hallaron la droga escondida bajo la ropa del procesado.
La sustancia iba repartida en dos lotes diferentes, conteniendo uno de ellos 50 gramos y el otro segundo la cantidad de 90 gramos. De acuerdo con lo recogido en el escrito acusatorio de la Fiscalía de Melilla, la droga incautada al acusado tenía un valor en el mercado de 2.490 euros.
Antes de que se iniciara el juicio, la defensa del procesado llegó a un acuerdo de conformidad con la representante del Ministerio Público, lo que necesariamente implicaba el reconocimiento de los hechos por parte del encausado.
De este modo, terminó rebajando la pena solicitada, que inicialmente era de dos años de cárcel. Además, debido a que el procesado carecía de antecedentes penales, la fiscal no se opuso a suspender su ingreso en prisión. No obstante, tendrá que abonar la multa para no ir a la cárcel.
El juez apercibió al encausado que, en el caso de que vuelva a delinquir en los próximos cuatro años, se le revocaría la suspensión y sí tendría que cumplir la pena de un año de cárcel. El hombre se mostró de acuerdo con los términos de la condena.