El Club Melilla Baloncesto cosechó en la tarde de ayer la séptima victoria de la presente temporada al derrotar a la escuadra del Peñas Huesca por 79-72, con susto final incluido ya que a falta de tres minutos para la conclusión del choque el marcador registró un parcial de 73-58, pero en un visto y no visto los oscenses se colocaron con un 73-70, a falta de sólo minuto para la conclusión del partido pero finalmente el triunfo no se escapó de Melilla.
El Melilla Baloncesto comenzó algo frío el encuentro de ayer frente al conjunto del Peñas Huesca, lo que fue aprovechado por el cuadro visitante para conseguir un primer parcial a su favor de 6-12, cuando se cumplió el cuarto minuto de juego. Los melillenses rápidamente se pusieron manos a la obra en su sistema de defensa para intentar acercarse a su rival lo que se vio tan sólo tres minutos más tarde llegándose a un 14-16. Un intercambio de canasta es lo que se pudo presenciar en los minutos finales del primer periodo y donde ninguno de los dos equipos se hizo acreedor a romper el choque a su favor ya que no se vieron los mejores minutos de baloncesto de la escuadra de nuestra ciudad a pesar de la importancia de lo que se jugaba de cara a escalar posiciones dentro de la clasificación general. Al final de los primeros diez minutos el marcador registró un tanteador de 18-20, favorable a Peñas Huesca.
En el inicio del segundo de los periodos, el conjunto melillense asentó a la perfección los sistemas defensivos lo que fue clave para coger las primera ventajas en el electrónico a su favor frente a un Peñas Huesca que imprimió un fuerte ritmo físico en cada uno de sus ataques. El único aspecto negativo que se pudo ver fueron los tiros libres fallados por parte de Melilla pero aún así se llegó a un 36-31, gracias a la acierto desde la línea de tres de Adrián Laso, que por cierto fue el único que se pudo ver en los dos primeros cuartos de juego.
Tras verse un periodo muy completo del cuadro dirigido por Alejandro Alcoba, el resultado que marcó el electrónico del pabellón Javier Imbroda fue de 44-37.
Otra vez y como ocurriera al principio del partido un comienzo frío de los jugadores melillenses hizo que los aragoneses colocaron un parcial de 0-8 para darle la vuelta al electrónico 44-45, en los primeros cuatro minutos del tercer periodo. Esta circunstancia se debió a las pérdidas de balón y el mal porcentaje en el tiro de los locales. El cuadro de nuestra ciudad tardó nada menos que cinco minutos en lograr su primera canasta de dos puntos. A destacar durante este periodo al jugador oscense Brizuela que bombardeó la canasta local con 19 puntos.
Al final todo quedó en una pequeña pájara ya que los melillenses se hicieron fuertes para irse al final del periodo con un 57-56.
Los primeros cinco minutos del último de los periodos que se vieron en el pabellón Javier Imbroda Ortiz fueron para enmarcar por parte de los pupilos dirigidos por Alejandro Alcoba, gracias al trabajo defensivo de todos sus hombres que desarbolaron una y otra vez al ataque visitante y en especial en ataque a Devid Wright y Eloy Almazán que consiguieron un parcial a su favor de 11-0 para colocar el resultado en 68-59. Los minutos siguieron pasando y el cuadro aragonés se mostró impotente de aminorar las distancias en el marcador llegándose a un resultado de 73-58, lo que hizo presagiar una finalización de partido totalmente tranquila para el conjunto de nuestra ciudad pero en el Javier Imbroda las sorpresas siempre están a la orden del día como ocurrió ayer ya que en dos minutos, el Peñas Huesca colocó un parcial a su favor de 0-12, a falta de tan sólo dos minutos para la conclusión del partido lo que hizo que aparecieran los fantasmas de otras temporadas pero finalmente todo quedó en un susto y la victoria cayó de parte del Club Melilla Baloncesto por 79-72.
El próximo compromiso que tendrá que afrontar el conjunto de nuestra ciudad se disputará el próximo viernes donde viajará hasta tierras gallegas para medir sus fuerzas frente al cuadro del Leyma Natura.