Las trabajadoras de los centros de educación infantil de gestión indirecta pero que trabajan en centros públicos llevan reivindicando desde hace tiempo “la modificación del tipo de contratación que han firmado con las empresas adjudicatarias de estos centros, pasando de la actual fijo-discontinuo a indefinido a tiempo completo”.
Las primeras conversaciones de la Federación de Enseñanza de UGT sobre esta cuestión se llevaron a cabo con el anterior Gobierno local y estaba la empresa para la que trabajan estas empleadas. “Posteriormente, con el nuevo Ejecutivo, se conversó con las representantes de Educación de la Ciudad. El primero realizarse fue para el centro San Francisco, los demás deberían adjudicarse a continuación, a medida que sus pliegos de condiciones fuesen renovándose”, apuntó el sindicato en un comunicado.
Sin embargo, FETE UGT indicó que se está produciendo “una demora, en especial, con la escuela infantil Josefa Calles, en la que se añade la situación financiera del Centro Asistencial. El sindicato comentó que hay un “contrato puente de duración anual en las mismas condiciones que el anterior y, por tanto, no asumiendo lo prometido a las trabajadoras de modificar sus contratos a indefinido a tiempo completo”.
Además, la federación destacó que esto “sin garantizar que esta medida no se pudiera volver a repetir, aplazando por tiempo indefinido lo prometido, cuestión que llevaría a tensiones que impedirían una paz social”.
Una vez que conoció esta situación, la FeSP-UGT envió diversos escritos a la Consejería de Educación para revertir esta situación, “a todas luces discriminatoria”. Asimismo, remarcó que los escritos no han sido contestados.
“Las trabajadoras de estos centros, en la situación actual de pandemia, han demostrado una profesionalidad enorme manteniendo las normas y protocolos establecidos, sabiendo que los usuarios con los que trabajan son menores de primer ciclo de Educación Infantil, donde el contacto con ellos es muy estrecho, conllevando en estos últimos meses una exposición a la Covid-19 que ha determinado la clausura de algunas aulas, repercutiendo negativamente en sus nóminas y todo ello sin disminuir la atención hacia los niños y niñas, así como a sus familias”, insistió.
Desde FeSP y la FETE-UGT Melilla se insta a la Consejería de Educación y al Centro Asistencial a reconsiderar la postura sobre el tipo de contratación para estas trabajadoras que “han mostrado una dedicación encomiable”.