A las 3:42 horas de la madrugada del domingo al lunes, Melilla volvió a temblar con un terremoto de 3,2 grados en la escala de Richter, con epicentro en el mar de Alborán, a sólo 65 kilómetros de distancia de la ciudad autónoma, según datos del Instituto Geográfico Nacional.
Se trata del tercer seísmo de cierta entidad que la ciudad autónoma ha sufrido este año.
El 1 de junio, la tierra se movió en Melilla sobre las tres de esta tarde, cuando un terremoto de magnitud 3,4 se dejó sentir en la ciudad. El temblor tuvo el epicentro al sur del Mar de Alborán y se notó fundamentalmente en las zonas altas y los pisos superiores de los edificios.
El seísmo se registró a las 14:52 horas y se pudo percibir en Melilla con intensidad II-III, según la información facilitada por el Instituto Geográfico Nacional (IGN), que en un principio había cifrado la magnitud una décima por encima, aunque tras el cálculo revisado la ha situado, finalmente, en 3,4.
El temblor se pudo sentir de manera leve en la ciudad autónoma, aunque fueron varios los melillenses que se han hecho eco en las redes sociales, al igual que en otras ocasiones en las que se han producido terremotos.
Igualmente, el 14 de abril, se produjo otro seísmo, que se originó a 30 kilómetros de profundidad y que tuvo una intensidad de 3,7 grados en la escala de Richter y se sintió durante unos segundos en Melilla a las 0:55 horas, pero, al parecer, no provocó grandes daños.
Ya se había producido más temprano algún aviso, aunque, debido a su magnitud, ninguno de ellos fue perceptible. En concreto, por la mañana -a las 4:55 horas- y al mediodía –a las 14:16 horas- hubo dos de 2,1 grados cada uno.
En cualquier caso, en algunas zonas del planeta, los seísmos de estas intensidades son, más o menos, frecuentes. Según la escala de Richter, los terremotos con magnitudes entre 3 y 3,9 grados son perceptibles a menudo, pero rara vez provocan daños.