José María Asencio nació hace 36 años en Alicante. Desde muy joven, su padre le inculcó el amor por la música y la lectura. Pasiones que no sólo conserva sino que cultiva. Con tan sólo 24 años aprobó las oposiciones a judicaturas y, en la actualidad, es magistrado y escritor, aunque yo lo definiría como un hombre del Renacimiento porque pocas cosas se le resisten a este joven modesto, pero con un gran bagaje a sus espaldas y lo que le resta por venir.
En abril salió a la luz su segunda novela, titulada Entre Acordes y Cadenas, en la que narra la historia a través de la música.
Tras años de documentación y escritura ve la luz este gran trabajo con ilustraciones, nada más y nada menos, que del gran cantautor Luis Eduardo Aute. Si las tapas son maravillosas, el contenido no se queda atrás.
Con motivo de la celebración de la patrona de los abogados, este viernes, José María Asencio presentó en el Colegio de Abogados de Melilla su última obra, en la cual estuvo acompañado por el decano del Colegio, Blas Jesús Imbroda.
-¿Hoy presenta Entre Acordes y Cadenas, pero no es su primera incursión en el mundo de la literatura?
-Antes había escrito una novela, titulada En busca de la irrealidad, una obra donde reivindicaba la vida bohemia, la creación, fundamentalmente, en el barrio del Rabal, de Barcelona. Es una reivindicación a la heterogeneidad cultural de los barrios y de las ciudades algo muy importante, y más aún aquí en Melilla.
-¿Y qué diferencia hay entre sus obras y la que se presenta hoy en Melilla?
-La primera novela era estrictamente una novela, mientras que Entre Acordes y Cadenas es un ensayo, un recorrido por la historia del siglo XX, e incluso he abordado historias del siglo XIX y XXI. A través de la música hago ese viaje por todo el globo desde Europa hasta África, y desde Rusia hasta Latinoamérica.
-¿No le resultó complejo integrar la música a la literatura?
-Yo soy un apasionado de la música en todas sus facetas y con el paso del tiempo he logrado entender que a través de la música se pueden mover conciencias. Hay canciones que han acompañado una despedida, una revolución, una historia de amor y qué mejor manera que explicar la historia desde unos sentimientos que nacen desde lo más profundo del alma humana.
-¿Qué autores podemos encontrar en este libro?
-Desde autores españoles como Alaska, Loquillom o Serrat, pero podemos cruzar el charco con Johnny Cash y con música africana.
-Magistrado, escritor, músico, ¿cómo le da tiempo para escribir?
-No tengo redes sociales y rara vez veo la tele. Entonces eso me otorga muchísimo más tiempo que aquellos que se pasan las noches consultando Tik Tok.
- Escribir una novela y enfrentarse al folio en blanco es una tarea ardua, pero ¿es más complejo escribir o documentarse?
-Lo más complejo es recopilar toda la información y después hacer pequeños relatos cortos porque es un libro de pequeños relatos cortos y relacionarlos con la música fue lo más difícil.
-En abril presentó su último libro, ¿cómo está siendo la aceptación?
-La aceptación, para mi sorpresa, fue muy buena. Este verano, lo presenté en Colombia, México y originariamente en Sant Jordi, en Barcelona y de ahí hasta llegar a Melilla. En el Liceo, de Barcelona lo presentamos con un concierto de piano y flauta, y es lo que estamos haciendo por toda España también con piano y chelo.
-¿Por qué el título Entre Acordes y Cadenas?
-Acordes porque para mí, la música es libertad y las cadenas representan la opresión. La música siempre se mueve entre Escila y Caribdis.
-¿Tiene previsto escribir novela negra, tal vez porque muchos de sus colegas lo han hecho?
-No. Rotundamente, no. Estoy escribiendo otra cosa, pero prefiero dejar aparcado mi trabajo. No quiero que la literatura se convierta en parte de mi trabajo como magistrado.
Sabemos que José María Asensio trabaja en un nuevo proyecto literario y tenemos claro que no versará sobre novela negra. Eso sí, Asencio deja espacio a la imaginación y se reserva sobre qué versará su próximo libro.
Hasta ese momento disfrutaremos de su lectura y esperamos que su futura obra también llegue a nuestra ciudad.