La Ciudad Autónoma quiere conocer de primera mano las “inquietudes” de las navieras interesadas en hacerse con el servicio de transporte marítimo entre Melilla y la península. Por ello, el Gobierno local ha establecido contactos con dos de las compañías mejor posicionadas para presentarse al concurso: La actual concesionaria, Acciona Trasmediterránea, y Armas.
El portavoz del Ejecutivo melillense, Daniel Conesa, señaló en la jornada de ayer a los medios de comunicación que no se está negociando con las empresas, sino manteniendo conversaciones para conocer su postura. “Gracias a los contactos establecidos, ahora contamos con mucha más información” subrayó.
Además, recalcó que ahora mismo existe una “sintonía interesante” entre las navieras y la Ciudad. Por otro lado, señaló que antes de que el concurso quedara desierto el pasado mes de enero también se establecieron conversaciones con Grimaldi.
“Hay que reajustar las condiciones sin salirnos de las líneas básicas”, subrayó el portavoz. Hay que recordar que el único aspecto que se cambiará del pliego es la cuantía máxima de los billetes, que ahora será mayor. Pese a la modificación, los pasajes seguirán siendo más baratos que los actuales.
“Tenemos derecho”
En opinión de Conesa, las condiciones del primer pliego que salió a concurso eran “muy ambiciosas” y por ello éste quedó desierto. No en vano, defendió a capa y espada que los melillenses “tienen todo el derecho a exigir lo mejor” para desplazarse a la península.
“Antes los procesos de adjudicación no quedaban desiertos porque se lo ponían fácil a la empresas. El último concurso fue una acomodación clara, para ponerlo en bandeja. Por poner un ejemplo, se pidieron barcos más antiguos”, reprochó. “Nosotros somos mucho más exigentes. Queremos buques modernos y rápidos. ¿Por qué vamos a ser menos que otras autonomías?”, añadió.
Por último, el portavoz del Ejecutivo local reseñó que el servicio de transporte marítimo entre Melilla y la península está garantizado gracias a la prórroga del acuerdo con la actual adjudicataria, Acciona Trasmediterránea, que seguirá operando hasta agosto. A partir de esa fecha se espera que el contrato ya esté adjudicado y la naviera concesionaria pueda comenzar a trabajar sin que haya interrupción alguna de las comunicaciones con la península.