Juan Antonio Acuña (Melilla, 1964) lleva, junto a su hermano Francisco, la pastelería Gurugú y el horno obrador que hay en la calle Castelar. Son cerca de 50 años ya en el negocio.
-¿Cómo le va la vida?
-Normal. Si te quejas porque te va mal, no te sirve de nada, o sea, que luchando como siempre.
-¿Cuánto tiempo lleva con el obrador?
-Yo llevo trabajando aquí desde los 15 años. Son 46 años.
-Pero este lugar tiene más tiempo…
-Claro. Esto está desde el año 1917.
-¿De quién era?
-Lo montaron unos catalanes que vinieron a Melilla. Mi padre vino aquí después de la guerra civil. Era un crío que entró aquí de aprendiz y ya se quedó aquí, y después mi hermano y yo.
-¿Qué es lo que más y lo que menos le gusta de su trabajo?
-Lo que más, el reconocimiento. Todo el mundo, más o menos, nos conoce. Y la empresa, que tiene un prestigio. ¿Lo que menos? La cantidad de horas que echo de trabajo, que todos los días son entre 12 y 14. Quieras o no quieras, termina quemando.
-¿Puede contar alguna anécdota que le haya sucedido en el obrador?
-El reconocimiento de la gente. Por ejemplo, el cantante de Duncan Dhu (Mikel Erentxun), que vino por aquí por Melilla y se llevó unos tocinos de cielo a San Sebastián y su madre le dijo que nunca había comido unos tocinos de cielo como los que hacemos nosotros.
-¿Cómo ve el futuro de Melilla?
-Desde que la frontera está cerrada, lo veo fatal. Melilla es una ciudad de comercio y, aunque todo el mundo quiera hacer otras cosas, la frontera es lo que mueve Melilla. A mí, personalmente, como pequeña empresa, el dinero flotante es el que se mueve a través de la frontera en general a toda Melilla. El funcionariado no gasta mucho en Melilla, porque suelen irse los fines de semana. La frontera está matando Melilla.
-¿Cuáles son sus próximos retos?
-Ya me quedan pocos retos, porque dentro de poco me voy a jubilar si puedo, jaja. Voy a cumplir 62 años, así que tampoco tengo ningún reto en especial.
-¿Qué es lo más curioso, o extraño, que le ha pasado en su vida?
-Unas vacaciones, estando en Londres, estábamos buscando una camiseta de AC/DC con mi hija. Entré a una tienda y la dependienta me reconoció, porque era nieta de Fatma, una mujer que trabajaba con mi abuela. Y me reconoció. Era de aquí al lado, de Farhana, y, quieras que no, con toda esa zona siempre hemos tenido mucho contacto. ¡Y esa persona me reconoció en Londres!
-¿Cuál es su expresión melillense favorita?
-La verdad es que no sé qué decirte.
-¿Y su rincón favorito de Melilla?
-Aguadú está muy bien y prácticamente toda la zona de costa.
-Explique su filosofía de vida…
-Disfruta lo que puedas sin hacer daño a nadie.
-Diga un lugar al que le gustaría viajar.
-Pues mira: a San Mamés, a ver el campo del Athletic de Bilbao.
-¿Por qué a San Mamés?
-Porque soy del Athletic de Bilbao. He estado cerca, pero nunca he llegado.
-¿Viajaría al futuro?
-¡Qué va! Tengo bastante con el presente. ¿Para qué quiero futuro? No tengo tiempo para gastar el presente. Estoy todo el día en el trabajo.
-¿En qué época histórica le habría gustado vivir?
-Sinceramente, la que tengo. No anhelo ninguna época pasada ni futura. Mi época de pequeño fue también bastante interesante, que fue el final de la dictadura y el comienzo de la democracia. Ha sido una época bastante interesante y la gente joven hoy en día no saben lo que dicen ni de dónde venimos. Es bastante lastimoso.
-¿Usa mucho las redes sociales?
-Poco. Estoy en casi todas ellas, pero no suelo meterme mucho.
-¿Cuál es su color favorito?
-El negro.
-¿Qué música suele escuchar?
-De los años 70, 80, 90. Grupos de ‘rock’ generalmente. 2000 y 2000 y algo también y música española de ese tiempo. Pink Floyd, Supertramp y ese tipo de música.
-¿Cuál es su comida favorita?
-Todo lo que sea de pescado a la plancha, paella, lentejas… Todo lo que es potajeo también.
-¿Y la bebida?
-Etiqueta Negra con Sprite.
-¿Cuál es su época del año preferida?
-El verano.
-¿A qué dedica el tiempo libre?
-El poco que tengo, realmente… Antes, que tenía más tiempo libre, me gustaba pescar, pasar el día en los Pinos, salir por la noche…
-¿Qué prenda de ropa no falta en su armario?
-Camisas y pantalones. Tampoco cazadoras.
-¿Tiene miedo a algo?
-No. No me paro a pensar en tener miedo a algo.
-¿Cuál es el mejor consejo que le han dado?
-No sé si es muy válido: “En esta vida te llevarás lo que comas, bebas, te relaciones y nada más”.
-¿Y el mejor que ha dado usted?
-El mismo.
-Para terminar, ¿me puede decir su mejor y su peor recuerdo en la vida?
-Mi mejor recuerdo es cuando nació mi hija y el día que la tuve en mis manos. Como hombre, la sensación paterna no se tiene hasta que tienes a tu hijo en tus manos y, cuando lo tienes en tus manos, ahí ya es cuando cambia el mundo completamente. El peor, el día que murió mi padre.
Seguro que son buenos pero para pasteles los del Bar Donosty de mi amigo Pepe.
De todas partes de Melilla vienen a comprar...
Propongo que le hagais una entrevista también.
Trabajador nato
40 años hace que mi familia se fue de Melilla. No hay ni una sola vez que les diga que voy a ir a verlos , que no me encarguen tocinos, merengues, pastelitos de carne...
Se fueron siendo niños y no han olvidado: Tráeme pasteles de La GURUGÚ.
Y lo hago encantada, para desconcierto de la G.C. y sus maravillosos perros que alucinan con el olor...
No he probado, mejores merengues, mejores pastelitos de carne y empanadillas...