La Ciudad Autónoma de Melilla ha anunciado la apertura de un expediente sancionador contra la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) por la paralización de las obras de saneamiento que esta entidad tiene en marcha en la Avenida Reyes Católicos. Este organismo público, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, tiene la responsabilidad de modernizar la red de saneamiento en ese punto de la ciudad.
La actuación, que permanece detenida desde hace más de dos meses, ha generado múltiples molestias a los vecinos de la zona y ha sido calificada como un ejemplo de “dejadez” institucional por parte del Gobierno local, que acusa a la Delegación del Gobierno de no haber reaccionado ante el conflicto surgido con la empresa adjudicataria.
Según ha informado este viernes la Consejería de Seguridad Ciudadana, la interrupción de los trabajos ha ocasionado numerosos perjuicios tanto al tráfico rodado como al transporte público, en una de las avenidas más transitadas y céntricas de la ciudad. Además, el volumen de terreno intervenido y el estado de las obras ofrecen, según el Ejecutivo melillense, una imagen muy deteriorada de la vía, que afecta tanto a la vida diaria de los residentes como a la estética urbana general.
“Lamentamos profundamente la dejadez de la Delegación del Gobierno en este asunto”, han manifestado fuentes oficiales del Gobierno de la Ciudad Autónoma en su comunicado público. El expediente sancionador responde, precisamente, a esta inacción ante una obra que, por su ubicación y carácter estratégico, debería contar con una supervisión constante y eficaz, consideran desde el Ejecutivo de Imbroda.
Estas obras forman parte de un proyecto mayor que busca modernizar las infraestructuras del ciclo del agua en Melilla. En este sentido, uno de los antecedentes relevantes es el contrato adjudicado por la CHG para la ampliación de la Instalación Desalinizadora de Agua de Mar (IDAM), valorado en 17,4 millones de euros. Esta actuación tiene como objetivo aumentar la capacidad de producción y asegurar un abastecimiento más eficiente para la población, especialmente en un contexto de escasez hídrica y alta dependencia del agua desalada.
Además, el Gobierno local ya ha manifestado en otras ocasiones su intención de asumir la gestión integral del ciclo del agua mediante la creación de una empresa municipal mixta, lo que daría mayor control a la Ciudad Autónoma sobre los proyectos, licitaciones y mantenimiento de las infraestructuras hídricas. Esta propuesta está en fase de estudio, según indicó la propia administración hace unas semanas.
La situación en Reyes Católicos se ha convertido en una de las principales preocupaciones del Ejecutivo melillense, que ha recibido numerosas quejas vecinales y de comerciantes de la zona. Muchos residentes han mostrado su malestar ante el parón prolongado de las obras, señalando las dificultades que enfrentan a diario por los desvíos de tráfico, la reducción de espacio peatonal y la suciedad acumulada en la zona.
Por su parte, la Delegación del Gobierno no ha emitido, por el momento, una valoración oficial sobre el expediente anunciado, aunque se espera que en los próximos días pueda pronunciarse al respecto.
La apertura del procedimiento sancionador busca presionar para que se retomen cuanto antes los trabajos, así como exigir responsabilidades por la situación generada. El Gobierno de Melilla considera que este tipo de actuaciones deben contar con mecanismos de seguimiento más rigurosos, sobre todo cuando afectan de forma directa a la vida cotidiana de cientos de ciudadanos.
Este nuevo episodio vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de una mejor coordinación entre las administraciones implicadas en el desarrollo de infraestructuras clave para la ciudad. Mientras tanto, los vecinos de Reyes Católicos continúan esperando una solución que permita recuperar la normalidad en una arteria fundamental de Melilla.
Gloria a Dios, en los Cielos y Paz en la Tierra, a los hombres de buena voluntad. Es una gran satisfacción, sentirse amparados, con todo el raciocinio debido, que los políticos gobernantes de la Ciudad, para ir sacudiendo a los que, presuntamente, mala pinta ofrecen, no debiéndose permitir tal desidia por dicho organismo, dando la sensación de desmerecerse, cuando tendría, que ser, como el lema de la “Academia de la lengua” que nos dice: “Limpia y da esplendor”.
Gloría a Dios, en los Cielos y Paz en la Tierra, a los hombres de buena voluntad. Es una gran satisfacción, sentirse amparados, con todo el raciocinio debido, por los políticos gobernantes de la Ciudad, para ir sacudiendo a los a los que, presuntamente, mala pintan ofrecen.
Y la Sra. Moh y sus funcionarios , ausentes. Si se le pregunta , volverá a las famosas frases ya amarillentas de..."estamos estudiando ." o bien ...."estamos trabajando ." y otras muchas mas que sabe y que siempre terminan en...".....ando".