-
El saxofonista y cantaor actuará mañana en la plaza Pedro de Estopiñán. Con El Faro habla sobre su último trabajo, ‘Oriente’, con el que reivindica un mundo más “libre” y con menos muros
Cuando el músico gaditano Antonio Lizana (San Fernando, Cádiz, 1983) se presentó por primera vez con 10 años en el conservatorio de Música de su ciudad natal buscaba un instrumento con el que podría interpretar todas las canciones de los que por aquel entonces ya eran sus artistas favoritos: Pink Floyd, Jethro Tull o Deep Purple, entre otros. Se decantó por el saxofón. “Era el instrumento que me permitiría imitar las melodías de rock, folk rock y rock sinfónico”, argumenta.
Ahora, 25 años más tarde interpreta sus propios temas y con estilo personal: Fusiona el jazz con flamenco. Su último disco ‘Oriente’ lo presentará mañana, a partir de las 22:00 horas, en el concierto del ciclo Música a la Luna en la plaza Pedro Estopiñán de Melilla La Vieja.
En su último trabajo habla sobre las fronteras que ocupan nuestro mundo. Resulta imprescindible preguntarle por la que separa nuestra ciudad de Marruecos. Lizana asegura que entiende que no se pueda retirar “de la noche a la mañana”, pero, a su juicio, los muros nunca deberían de haber sido levantados. “Las fronteras existen porque los pueblos separadas son más fáciles de gobernar”, señala. Lizana anhela un mundo más igualitario y lamenta que dependiendo de donde uno nazca ya tenga el futuro escrito. “Sólo por el hecho de nacer en un sitio u otro tienes más o menos oportunidades. Deberíamos ser todos iguales y tener los mismos derechos”, dice.
Componer
El artista aprovecha la música para hacer esta reivindicación. Por tanto, a la hora de componer se basa en sus reflexiones, dudas y deseos. No teme al papel en blanco. De hecho, para crear sus composiciones evita partir de cero. “Siempre intento contar con una base, con algún hilo del que poder tirar. Por ejemplo, me planteo que quiero un tema por bulería y una vez que tenga esta idea, ya voy añadiendo propuestas. Pienso que éste podría ir acompañado por ritmo de batería y una parte cantada”, explica. Sí, ha leído bien. Aparte de tocar el saxofón, este joven gaditano es cantaor. Cuenta que empezó a desarrollar la voz en los círculos más íntimos. “Cantaba piezas de flamenco en familia”, recuerda.
Concierto de mañana
Mañana, el saxofonista y cantaor estará acompañado en la Plaza Pedro de Estopiñán por batería, piano y bajo. Lejos de querer acaparar todo el protagonismo resalta la labor de sus compañeros. “Los discos llevan mi nombre, pero ellos también juegan un papel muy importante tanto en las actuaciones como en los ensayos. Llevo mis esquemas con mis ideas, pero ellos hacen aportaciones que resultan muy enriquecedoras ”, señala.
El hecho de poder adaptarse a propuestas o peticiones de los demás lo ha demostrado en infinitas ocasioens. Lizana ha colaborado con Miguel Ríos, Chambao, Raimundo Amador, David de María, José Mercé, Juan Parrilla, India Martínez, Tucara y Rancapino, entre muchos otros.