El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, ha celebrado este miércoles un “dato histórico” para la economía local: casi 26.000 personas afiliadas a la Seguridad Social, la cifra más alta registrada en la historia reciente de la ciudad. Según el mandatario, este crecimiento refleja que las medidas adoptadas por su Gobierno desde su llegada al poder en junio de 2023 “están empezando a dar sus frutos” y están sentando las bases de una economía “sólida y sostenible”.
Imbroda ha subrayado que la afiliación media a la Seguridad Social constituye “el termómetro más fiable” para medir la salud del mercado laboral. “Si alguien tiene un empleo, se tiene que dar de alta. Por lo tanto, la afiliación media de la Seguridad Social refleja realmente cómo va la economía”, explicó. En el último mes, Melilla ha alcanzado los 26.000 afiliados, frente a los 21.000 que se contabilizaban en junio del año pasado, lo que supone un incremento del 22% en apenas un año y medio.
Una evolución sin el apoyo del Estado
Durante su intervención, Imbroda cuestionó el papel de la Administración Central en la creación de empleo en la ciudad y planteó una reflexión a los medios de comunicación: “¿Qué ha hecho el Gobierno central para que se cree un puesto de trabajo? Díganme si saben de alguna inversión nueva que se haya hecho en estos dos o tres años”. Según el presidente melillense, no se han producido nuevas inversiones significativas impulsadas desde Madrid que expliquen este aumento del empleo.
“El hospital, por ejemplo, cuya obra se ha terminado, es un proyecto del anterior Gobierno de Rajoy, no del actual Ejecutivo. Por lo tanto, no es una inversión que esté generando empleo ahora mismo”, puntualizó. En este sentido, insistió en que el crecimiento económico y laboral de Melilla se debe a políticas y proyectos puestos en marcha por el Ejecutivo local desde mediados de 2023.
Las tres claves del crecimiento
Imbroda atribuyó la mejora económica a tres pilares fundamentales: la expansión universitaria, el impulso al turismo y el desarrollo del sector tecnológico e innovador. En primer lugar, destacó la contribución de la Universidad de Granada en Melilla, cuya actividad representa ya el 4,7% del Producto Interior Bruto (PIB) de la ciudad. “Toda la ampliación de nuevos grados que hemos puesto en marcha y las inversiones que hemos realizado han generado cerca de mil empleos directos”, señaló, citando un estudio reciente de la propia Universidad de Granada.
El presidente resaltó además el impacto positivo de los bonos turísticos, que, según explicó, movilizan entre cinco y seis millones de euros anuales y han multiplicado por varias veces la inversión inicial. “Se nota en la ocupación hotelera, en la hostelería y en el comercio. Melilla está atrayendo a más visitantes y eso dinamiza nuestra economía local”, afirmó.
En tercer lugar, Imbroda mencionó el auge de la innovación tecnológica como otro de los motores del crecimiento. Según sus datos, alrededor de mil personas trabajan actualmente en este sector emergente, impulsado por nuevas empresas y proyectos de captación de talento. “Estamos sembrando una economía de futuro, basada en la tecnología y la sostenibilidad”, sostuvo.
“Brotes verdes” de una economía sostenible
El líder del Ejecutivo melillense defendió que los resultados actuales no se deben a los tradicionales planes de empleo de corta duración, sino a una transformación más profunda. “Estamos hablando de empleo sólido, no de contratos de cuatro o seis meses que luego desaparecen. Lo que buscamos es una economía sostenible, con cimientos reales”, enfatizó.
Imbroda aseguró que ya se empiezan a ver “brotes verdes interesantísimos” en la economía melillense y habló de una “revolución económica” iniciada tras su llegada al Gobierno. “Las decisiones fueron duras, pero están dando resultados. Las cosas van bien y van a ir mejor”, afirmó con optimismo.
Inversiones y obras públicas en marcha
El presidente también destacó el impulso de la obra pública como parte del proceso de recuperación. “Cuando llegamos al Gobierno, muchas obras estaban paradas. Hoy, la Plaza de España, el edificio de Correos y otros proyectos están en marcha”, enumeró. Además, adelantó que el año 2026 será “un boom de inversión pública” gracias a las adjudicaciones que ya están en preparación. “Hemos hecho la tarea administrativa de arrancar los proyectos, que es lenta pero imprescindible, y ahora empieza a verse el resultado”, explicó.
Llamamiento al Estado: “Hace falta más impulso”
Pese al tono triunfalista, Imbroda aprovechó su intervención para reclamar al Gobierno central una mayor implicación con Melilla. “La economía local va por buen camino, pero necesita más apoyo. Hace falta un impulso adicional por parte de la Administración del Estado”, afirmó. Entre las medidas que consideró prioritarias, mencionó la necesidad de reforzar las “obligaciones de servicio público”, especialmente en las líneas aéreas con Madrid y otras conexiones peninsulares.
“Nos gustaría que el Estado se volcara más con nosotros, porque Melilla tiene un potencial enorme”, señaló. No obstante, concluyó su intervención con un mensaje de satisfacción: “Estoy contento porque se están viendo los frutos de unas decisiones que fueron difíciles, pero que están saliendo adelante. Esta cifra récord de afiliados es la mejor prueba de que vamos por el buen camino”.








