Marruecos planea construir un centro comercial de lujo a la entrada de Nador, en el entorno de McDonald's y con vistas al mar.
La idea es reproducir, a menor escala, el Morocco Mall, de Marrackech. Se trata de un proyecto que va en sintonía con la construcción de una zona comercial outlet en las inmediaciones de Ceuta.
El nuevo centro comercial de Nador, cuyo terreno está siendo acotado con vallas, tendrá una fachada que dará a la laguna de la Mar Chica; otra a McDonald's y las otras dos, al Paseo Marítimo, según fuentes interesadas en vender el proyecto con bombo y platillos.
Con el ánimo de desarrollar macroproyectos en Nador, en 2022 está prevista la visita del rey Mohamed VI a la la región para poner la primera piedra de una ciudad turística que planean levantar en la zona del Cabo Tres Forcas.
Las fuentes consultadas no han precisado si la llegada del rey coincidirá con los planes marroquíes de apertura de la frontera de Melilla "independientemente de lo que decida hacer España" la próxima primavera.
Al respecto, la delegada del Gobierno de Melilla, Sabrina Moh, ha sido meridianamente clara, al explicar que no hay fecha fija para la reapertura del paso fronterizo de Beni Enzar. Sin embargo, desde Marruecos tienen interés en soltar el globo sonda e insisten en que será en marzo. Hasta hace poco defendían que sería a primeros de año, tras las Navidades. Cabe la posibilidad de que lo hagan para mantenernos en ascuas.
En Nador, como en Melilla, no hay unanimidad a la hora de opinar sobre la reapertura de la frontera. Los partidarios de retomar el tráfico fronterizo advierten de que tal y como están las relaciones en la actualidad es impensable plantearse una línea marítima que conecte el puerto de Melilla con el de Beni Enzar.
Ni siquiera se habla ya del otro lado de la frontera, insisten, de la línea marítima que se barajó con cierto consenso para traer material de construcción marroquí a Melilla.
En definitiva, para que todo esté listo para la visita del rey, se han reformado durante la pandemia las carreteras de Nador, incluidas las que dan acceso al palacio real, con vistas al mar y a Melilla, donde incluso se ha especulado que el monarca quiere retirarse a disfrutar de sus últimos días.
La versión oficial de Marruecos, como no puede ser de otra manera, niega que con la apertura de este gran centro comercial de lujo en Nador, Rabat busque estrangular económicamente las grandes superficies que se han establecido en el parque Murias de Melilla, junto a la frontera de Beni Enzar.
Todo lo contrario: insisten en vender que el proyecto de urbanización de la Mar Chica, incluye en su promoción la cercanía a una ciudad europea, con el atractivo turístico de la muralla de Melilla La Vieja. Pero eso es imposible contrastarlo.
"Melilla entra en el marketing de la Mar Chica", aseguran, descartando cualquier interés marroquí por anexionarse este territorio. Por eso, insisten, eliminaron el contrabando. De hecho, el discurso oficial defiende que la imagen de las porteadoras es negativa para la promoción de un proyecto de lujo como éste, con hoteles y casinos regentados por empresarios turcos.
Para que eso sea una realidad, Melilla, recalcan, tendrá que mejorar temas como el de la limpieza o sanitarios como el de las manadas de perros, que tienen escandalizada a la élite marroquí que ve la paja en nuestro ojo y no nota la viga en el propio.
Hasta tal punto reina el optimismo del otro lado de la frontera, que hablan de que cuando todo el complejo de Mar Chica esté listo, no hará falta la valla.
Pero ese buen rollo contrasta con la reunión que aseguran que se celebró este domingo en el puerto de Nador, en la que se habló de los preparativos para la Operación Paso del Estrecho de 2022 que, en principio, excluirá a Melilla.
En ese encuentro se habló, fundamentalmente, del sistema automatizado que se utilizará para leer los códigos de los pasaportes covid. Esta información se compartirá con los puertos de los países que participen en la OPE. Además, se barajó la posibilidad de facilitar las cosas para que los papeles del coche y los pasaportes se chequeen en el interior del barco.
Aún así, defienden que el conflicto hispano-marroquí se arreglará como se ha arreglado otras veces y piden tranquilidad porque las piscifactorías de la discordia se las llevará el primer poniente que entre con fuerza. Y en Marruecos no se enfadarán porque aseguran que detrás del empresario marroquí que las ha instalado, hay un inversor gallego que tendrá que responder ante España.
Esta es la versión que nos venden desde el otro lado de la frontera. Cada uno cuenta la feria según le va.
Dejemos a Marruecos con sus imnovaciones y modernidades, pero mantengamos cerrada nuestra frontera con ellos y a ser posible no acerquemos demasiado nuestras relaciones diplomaticas, a quien es un traidor por naturaleza.
Esas carreteras con esas curvas tan pronunciadas van a generar muchos accidentes, sobre todo a las velocidades a las que suelen ir conductores de la provincia de Nador. Además de la costumbre de poner arcenes de gravilla fina y suelta... ingeniería al servicio de la tragedia vial.