Con la reciente eliminación en los cuartos de final de la Superliga Masculina de Voleibol, el entrenador del Club Voleibol Melilla, Salim Abdelkader, ha realizado un análisis detallado de la temporada 2024/2025, destacando el compromiso y esfuerzo de sus jugadores en un curso que calificó como "exigente y lleno de desafíos".
Los melillenses iniciaron la serie de cuartos con una esperanzadora victoria en casa ante el Grupo Herce Soria Voleibol, pero no pudieron culminar la gesta en los dos encuentros disputados como visitantes en el pabellón de Los Pajaritos, donde cayeron en ambos, sellando así su despedida del campeonato. Abdelkader lamentó especialmente el rendimiento de su equipo en el segundo encuentro, clave para las aspiraciones de los azulinos, y reconoció que ese tropiezo marcó el devenir de la eliminatoria.
“No estuvimos a la altura en el segundo partido, lo que condicionó nuestras opciones. Sabíamos que era un encuentro fundamental y no respondimos como deberíamos”, afirmó el técnico. “El sábado terminamos con malas sensaciones porque empezamos bien, con buena actitud, pero no tuvimos recompensa. Luego bajamos el nivel, cometimos errores y eso nos perjudicó”.
Reacción y esfuerzo en el tercer partido
Pese al revés, Abdelkader valoró de forma positiva la actitud de sus jugadores en el tercer y definitivo encuentro, donde el equipo compitió con mayor intensidad y mostró una versión más cercana a su verdadero nivel. “Jugamos a un gran nivel, ganamos el primer set y peleamos todos los parciales. Soria apenas cometió errores y eso les permitió mantener el control, pero estuvimos cerca. Esa frustración de no poder concretar es lo que más dolió”, explicó.
El técnico insistió en que el equipo se vació en pista y que, pese a la eliminación, la imagen ofrecida en el último partido deja sensaciones positivas de cara al futuro.
Balance de la temporada: exigencia, Europa y orgullo
Más allá del resultado en los cuartos de final, Salim Abdelkader destacó el esfuerzo colectivo del grupo durante toda la temporada, en la que además de competir en la Superliga, el Club Voleibol Melilla disputó competiciones europeas, elevando el nivel de exigencia y carga física del equipo. “Ha sido una temporada muy exigente. Competimos en Europa a un gran nivel y en una de las Superligas más duras de los últimos años. Siempre nos faltó un poco más, pero con la plantilla que teníamos era complicado”, analizó el entrenador.
El club ha tenido que lidiar con una campaña cargada de partidos, desplazamientos y desafíos, en la que los jugadores han mostrado compromiso y profesionalismo en todo momento. Abdelkader aprovechó también para reconocer el trabajo del cuerpo técnico, la implicación de la plantilla y el respaldo recibido por parte de la afición melillense, que una vez más respondió en los momentos clave de la temporada. Mirada al futuro: descanso y planificación