Álex Gómez, técnico de la escuadra melillense, realizaba unas declaraciones en las que incidía en que las lasalianas tienen por delante “un mes de marzo apasionante”, porque, como argumentó, “el final de la liga regular ya se va viendo en el horizonte, y es que tan sólo queda un tercio de la misma”. Luego porque van a jugar seis partidos, por lo que cree que se les va a hacer “un mes bastante corto, al haber tantos encuentros y, además, cuatro de ellos son en casa, lo que, a su entender, “siempre nos da un punto más de motivación, de presión y de pasión porque nos encanta jugar aquí en Melilla y nos va a hacer viajar algo menos, que nos viene bien a nivel físico y mental”, explicó. El preparador del MCD La Salle asegura que llegan a este tramo de la temporada en perfectas condiciones físicas. “Las piernas ya empiezan a pesar un poco más, pero en nuestro caso no es del todo así porque hemos sabido controlar muy bien a las jugadoras cuando han estado lesionadas o tocadas, no forzándolas, incluso alguna perdiéndose algún choque para no forzar la máquina. Hemos sabido controlar bastante ese tema y lo importante aquí es que mentalmente llegamos frescas, y eso hace que siempre corras un poquito más, un segundo esfuerzo más y eso es clave”, recalcó. El granadino añadía que “el equipo está bien, unido, con hambre y con ambición para poder disputar cada partido y seguir disfrutando de esta campaña”, que para él está siendo “muy bonita” para todas las jugadoras. Ya centrado en lo que resta de campeonato, Álex Gómez recordaba que quedan diez encuentros, que calificó de “muy importantes”, con vistas a sellar lo antes posible la clasificación para los play off de ascenso. Eso les hace “estar en alerta” porque quieren “continuar sumando triunfos y luego ir definiendo la posición final”, que no les “preocupa del todo” porque han demostrado ser “un conjunto que compite contra cualquiera”. Y es que resulta, según subrayó, “difícil jugar contra nosotras y en un play off en el que se juega a ida y vuelta, tampoco uno tiene muy claro si es mejor jugar primero en casa o a domicilio”. Para el técnico lasaliano lo que sí va a ser determinante es cómo lleguen a ese final de temporada, a esos play off si están dentro, y “no solo físicamente, sino también tácticamente, que el equipo sea cada vez mejor y que tenga más recursos para afrontar cualquier adversidad que pueda ocurrir en los partidos, pero también mentalmente, que la gente esté fresca de cabeza y con hambre”, dijo. Sobre el próximo rival, la Cordá de Paterna, el entrenador cree que “nadie puede estar confiado ni nada por el estilo, porque se trata de un club que lleva las dos últimas temporadas, no sólo estando en los play off, sino llegando a la Final Four. Saben disputar estos finales de curso cuando las cosas se ponen más calientes y saben de qué va esta liga”. Además, reconoce que se trata de un partido trampa, tanto por la clasificación del rival como por el hecho de que al ser filial de Valencia Basket “nunca sabes quién va a jugar y dependiendo de la convocatoria del primer equipo tendrá una jugadora u otra, y eso de primeras ya te genera un poco de incertidumbre”. También considera que las valencianas saben “competir, jugar finales de encuentros ajustados y juegan sin ningún tipo de presión, y eso al final le hace ser un equipo muy peligroso”, indicó. El preparador lasaliano destacó el regreso a la convocatoria de Macarena D’Urso, tras recuperarse de una lesión. “Es algo que nos alegra mucho, no sólo en lo profesional, y es que no hace falta decir lo que nos ayuda tanto en el campo como en lo personal. Es una jugadora que suma muchísimo en el vestuario y que me ayuda de forma increíble en el día a día”, explicó. También quiso hacer hincapié en el gran trabajo que está haciendo Lucía González, jugadora del conjunto nacional, que está dando “una enorme calidad a los entrenamientos”.